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Córdoba ha sido uno de los departamentos afectados por la temporada de lluvias que hay en el país. Aunque a nivel departamental ya la Gobernación había decretado la calamidad pública, también hicieron un llamado para que aquellos municipios que tuvieran afectaciones altas hicieran lo mismo.
Doce de los 30 municipios de Córdoba atendieron ese llamado y decretaron la calamidad pública en sus territorios. Canalete, Cereté, Ciénaga de Oro, Chinú, Planeta Rica, San Pelayo, Los Córdobas, Montelíbano, San José de Uré, San Carlos, San Bernardo del Viento y Valencia, son las Alcaldías que están en emergencia ante las precipitaciones.
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Desde la oficina de Gestión del Riesgo de Desastres departamental vienen haciendo un seguimiento cercano a todos los municipios que declararon la calamidad pública. Con esta figura buscan que la acción y respuesta frente a cualquier desastre sea rápida.
De acuerdo con el informe de predicción climática a corto, mediano y largo plazo, emitido por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) en julio de 2021, en agosto y septiembre las lluvias en Córdoba estarán dentro de los promedios anuales y no tendrán aumento, como si pasará en otros departamento de la región Caribe.
Según el Ideam la cuenca alta y media del río Sinú y sus afluentes están en alerta naranja por posible desbordamiento. Esto afectaría en mayor medida a los municipios de Tierralta y Valencia. Además la cuenta baja de este mismo cuerpo fluvial está en amarilla, por lo que recomiendan medidas para Montería y Lorica en este departamento.
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Otro de los ríos que tiene niveles altos en Córdoba es la cuenca alta y baja del río San Jorge, en el Bajo Magdalena. Desde el Ideam recomendaron medidas especiales para los municipios de Puerto Libertador, Montelíbano, Buenavista, Ayapel y La Apartada.
Montelíbano es el municipio que más preocupación genera en las autoridades del departamento. Según Carlos Arteaga, director de la Oficina de Gestión de Riesgos en Montelíbano, hay más de 700 familias damnificadas por las precipictaciones y las crecientes del río San Jorge.