El acalorado debate de la Asamblea de Santander por contaminación en Barrancabermeja
El alcalde culpó a la CAS por otorgar las licencias ambientales, y la Corporación le respondió que el basurero Yerbabuena continúa operando por la declaratoria de emergencia sanitaria del municipio.
redacción Nacional
Este jueves, en una sesión plenaria, la Asamblea Departamental de Santander vivió un 'acalorado' debate de control político cuyo tema central fue la crisis sanitaria y disposición de residuos sólidos de la ciudad de Barrancabermeja. (Lea: Segundo llamado por la Ciénaga de San Silvestre)
En la reunión las diferentes partes compartieron sus posiciones. El alcalde Darío Echeverry culpó a la autoridad ambiental por otorgar las licencias ambientales, mientras el director de la Corporación Autónoma de Santander (CAS), Juan Gabriel Álvarez, le recordó al mandatario que el relleno sanitario Yerbabuena tiene orden de cierre desde finales de 2016, pero por la declaratoria de emergencia sanitaria del municipio este continúa operando con aparente normalidad.
"La ciénaga San Silvestre es valiosa e importante por todo lo que representan sus ecosistemas y porque es un gran sitio turístico", escribió Echeverry desde su cuenta de Twitter. De acuerdo con el experto en medio ambiente, Heyner Mancera Rincón, “el alcalde y la Asamblea le pidieron a la CAS que revoque las licencias de los rellenos”, pero esta a su vez resaltó que había que tener en cuenta que no hay un “plan b” para la disposición de basuras de la capital petrolera.
Los diputados del departamento por su parte parecían desconocer la situación que desde hace unos meses El Espectador viene denunciando: dos rellenos sanitarios fueron construidos en zonas de protección ambiental de la Ciénaga de San Silvestre y el vertimiento de lixiviados está contaminando el agua de donde el acueducto municipal surte a más de 300 mil personas. (Lea también: Los males que amenazan de muerte a la Ciénaga de San Silvestre)
El representante de la Corporación Yarigiues, Yesid Blanco Calveté, indicó que “el encuentro fue muy positivo porque se nombró una comisión accidental permanente que estará monitoreando los movimientos que se realicen en la Ciénaga. Además, todo el debate se basó en las denuncias de la extralimitación del área de sustracción y el mercurio que está apareciendo en el agua”.
A la sesión descentralizada asistió también el Ministerio de Medio Ambiente, la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), la Secretaría de Planeación Departamental, el contralor departamental, diferentes organizaciones civiles y la Procuraduría, entidad que verificará impacto ambiental en la reserva hídrica y planea hacer un pronunciamiento oficial en un par de semanas.
Este jueves, en una sesión plenaria, la Asamblea Departamental de Santander vivió un 'acalorado' debate de control político cuyo tema central fue la crisis sanitaria y disposición de residuos sólidos de la ciudad de Barrancabermeja. (Lea: Segundo llamado por la Ciénaga de San Silvestre)
En la reunión las diferentes partes compartieron sus posiciones. El alcalde Darío Echeverry culpó a la autoridad ambiental por otorgar las licencias ambientales, mientras el director de la Corporación Autónoma de Santander (CAS), Juan Gabriel Álvarez, le recordó al mandatario que el relleno sanitario Yerbabuena tiene orden de cierre desde finales de 2016, pero por la declaratoria de emergencia sanitaria del municipio este continúa operando con aparente normalidad.
"La ciénaga San Silvestre es valiosa e importante por todo lo que representan sus ecosistemas y porque es un gran sitio turístico", escribió Echeverry desde su cuenta de Twitter. De acuerdo con el experto en medio ambiente, Heyner Mancera Rincón, “el alcalde y la Asamblea le pidieron a la CAS que revoque las licencias de los rellenos”, pero esta a su vez resaltó que había que tener en cuenta que no hay un “plan b” para la disposición de basuras de la capital petrolera.
Los diputados del departamento por su parte parecían desconocer la situación que desde hace unos meses El Espectador viene denunciando: dos rellenos sanitarios fueron construidos en zonas de protección ambiental de la Ciénaga de San Silvestre y el vertimiento de lixiviados está contaminando el agua de donde el acueducto municipal surte a más de 300 mil personas. (Lea también: Los males que amenazan de muerte a la Ciénaga de San Silvestre)
El representante de la Corporación Yarigiues, Yesid Blanco Calveté, indicó que “el encuentro fue muy positivo porque se nombró una comisión accidental permanente que estará monitoreando los movimientos que se realicen en la Ciénaga. Además, todo el debate se basó en las denuncias de la extralimitación del área de sustracción y el mercurio que está apareciendo en el agua”.
A la sesión descentralizada asistió también el Ministerio de Medio Ambiente, la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), la Secretaría de Planeación Departamental, el contralor departamental, diferentes organizaciones civiles y la Procuraduría, entidad que verificará impacto ambiental en la reserva hídrica y planea hacer un pronunciamiento oficial en un par de semanas.