Por 41 años, el diario La Tarde estuvo informando a los pereiranos. Por 41 años, el emblemático periódico, contó la ciudad y sirvió de cuna a los periodistas, caricaturistas, fotógrafos y otros artistas locales. Pero este martes, el diario circulará por última vez, aunque el miércoles habrá una edición conmemorativa de cierre. Así, llega a su fin la historia de uno de los diarios tradicionales de Pereira, luego de la adquisición del medio por parte de su rival directo, El Diario del Otún.
De esta forma, La Tarde, un periódico de corte liberal, estará ahora bajo la orientación de los hermanos Ramírez Múnera, de corte conservador y quienes desde diciembre de 2015 adelantaron una negociación con la familia Galvis del departamento de Santander, accionistas mayoritarios de La Tarde. La familia, liderada por el empresario Alejandro Galvis, es también fundadora y propietaria de otros diarios regionales como El Universal, Vanguardia Liberal y El Nuevo Día. El motivo principal para hacer dicha transacción fueron las dificultades económicas por las que atravesaba el diario, pues aproximadamente desde hace cinco años venía arrojando pérdidas.
El inicio de la debacle económica de La Tarde fue la adquisición de una sede y trasladó a esas instalaciones, ubicadas a las afueras de la ciudad. Desde ese entonces, las directivas del medio buscaron un repunte económico que nunca llegó, y la situación empezó a hacerse insostenible. Incluso en 2012 se intentó, como medida de contingencia, el nombramiento del exsenador Juan Guillermo Ángel Mejía en la gerencia del diario.
Cuando los hermanos Ramírez Múnera tomaron el control de La Tarde se acabaron cuatro décadas de poderío Liberal en la región, y justamente esa es una de las alertas que se hacen desde varios sectores, pues se especula con que el poder mediático de Pereira ahora quedará en manos de los conservadores.
La fusión de los diarios durará dos meses. En ese periodo de tiempo solo circulará un periódico en Pereira, y lo hará con las dos marcas, hasta que se logre un proceso de unificación de criterios entre los dos diarios. En cuanto a lo laboral, se espera que se dé un cambio de sede y de estilo de trabajo, pero la vinculación laboral será la misma, por lo que el centenar de empleados entre administrativos, comerciales, fotógrafos y periodistas, continuarían al servicio del nuevo dueño.
Esta es la última portada de La Tarde, antes de dar espacio a un gran periódico regional, que al parecer tendrá el nombre de “El Diario”.