Tras siete días del paro cívico que inició el Chocó para protestar contra el olvido estatal en el que se encuentra sumido el departamento, representantes del Gobierno, autoridades locales y regionales, así como voceros del paro en Chocó, alcanzaron un preacuerdo sobre álgidos puntos como: salud, infraestructura vial y energética, agua potable y Belén de Bajirá.
El conflicto territorial entre Antioquia y Chocó por el corregimiento Belén de Bajirá se remonta a hace 16 años. Ambos reclaman que el territorio es suyo. Pero la decisión final la tiene el Congreso de la República. (Lea: En febrero de 2017 habitantes de Belén de Bajirá sabrán si son chocoanos o antioqueños)
Durante la mesa de diálogo entre el Gobierno y Chocó, el ministro del Interior encargado, Guillermo Rivera, ratificó que defenderá ante el Congreso que el corregimiento que cuenta con más de 16 mil habitantes es de propiedad chocoana. (Lea: La vida en Belén de Bajirá, un pueblo sin dueño)
Esto teniendo encuentra el informe entregado por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac) el pasado 11 de febrero en el que se estableció que el pueblo es chocoano y hace parte del municipio de Ríosucio. El argumento principal es que la ley que creó en 1947 al Chocó incluyó en su territorio a Belén de Bajirá.
Pero Antioquia no cederá. Este departamento argumenta que la zona es del municipio de Mutatá (Antioquia) porque éste ha hecho inversiones en temas de salud e infraestructura importantes.
El Legislativo deberá tomar una decisión, que de no darse, se adoptarían inmediatamente como límites provisionales los definidos por el IGAC.