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Hasta la Serranía de Perijá, en Venezuela, fueron trasladados diez indígenas Yukpa (seis adultos y cuatro menores de edad) que estaban asentados en el Parque García Rovira de Bucaramanga desde diciembre del año pasado. De acuerdo con Melissa Franco, secretaria del interior de la ciudad, una familia de siete personas optó por retirarse del lugar y permanecer en la capital de Santander, mientras que otro grupo de personas continúa en el parque. “No hemos logrado concertar su salida”, dijo Franco, quien aseguró que piden $10 millones y una casa para abandonar el sitio.
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Durante el 2022, la Alcaldía de Bucaramanga han concertado la salida de cerca de 90 indígenas Yukpa, originarios de la Serranía del Perijá, que comprende los departamentos de César, La Guajira y Norte de Santander, así como una parte de Venezuela. Esta comunidad llegó caminando a Bucaramanga desde el estado de Zulia, huyendo de la crisis alimentaria hace cinco años, pero ante las condiciones de la pandemia y las dificultades para pagar el arriendo en donde estaban viviendo, decidieron tomarse el parque para buscar ayuda, según indicó a Vanguardia, Zenaida Romero Martínez, una de las voceras de la comunidad.
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Con ayuda de la Personería, Defensoría del Pueblo, Migración Colombia, Policía y la Procuraduría, la Alcaldía de Bucaramanga hizo el traslado de estas personas, otorgando transporte humanitario, mercados no perecederos y kits de aseo. Según Melissa Franco, la Empresa de Aseo de Bucaramanga (Emab) inició las labores de limpieza y se concertó la recuperación del parque junto con la Secretaría de Infraestructura de la ciudad.
Cabe recordar que a inicios de enero, 37 indígenas fueron llevados hasta Venezuela en el marco de las acciones de las autoridades municipales. Para ese entonces, al menos 50 indígenas permanecían en el parque.
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Según indicó Franco, la familia que decidió quedarse en la ciudad “recibirá las mismas ayudas para comenzar la ruta de atención con todas las instituciones y entidades del municipio”. Entretanto, continúan los diálogos para retirar a las personas que siguen en el parque.