Inundaciones en Bello (Antioquia) dejaron a 450 familias afectadas

Un fuerte caudal que se lleva todo a su paso: barras de metal, madera y residuos, fue el panorama que se vivió en Bello, municipio de Antioquia, durante la noche del 6 y la madrugada del 7 de agosto.

Por las fuertes lluvias que han ocurrido en la mayor parte del Valle de Aburrá, la quebrada La García se desbordó y ocasionó fuertes inundaciones.

Son al menos seis puntos los que concentran la contingencia: Playa Rica, Hato Nuevo, El Cairo, Panamericano, El Tapón y la Vereda el Salado. En algunos de ellos, incluso, se desplomaron varias viviendas horas después del desbordamiento.

Por ejemplo, en Playa Rica se vino abajo una casa de dos pisos que había sido evacuada previamente por los organismos de socorro ante las posibles amenazas.

Le puede interesar: Las razones por las que Medellín se inunda.

Hasta ahora, en un censo realizado por la municipalidad, se conoció de 450 familias afectadas por la contingencia. Los organismos de socorro que hicieron presencia en el sector entregaron alrededor de 200 kits con ayudas humanitarias.

“Estamos entregando ayudas humanitarias e invitando a la comunidad a que haga los desalojos pertinentes, nosotros vamos a estar acompañándolos con los subsidios y atención de la emergencia”, dio el alcalde de Bello, Óscar Andrés Pérez Muñoz.

Lea también: Deslizamiento en Cañasgordas (Antioquia) tiene a 5 mil familias incomunicadas.

Actualmente, todavía continúan las labores para remover los escombros y residuos que quedaron tras el desbordamiento de La García. También se decidió cerrar la vía La Blanca, que conduce hacia el corregimiento de San Félix. La fecha de su apertura aún no ha sido confirmada, pues según la municipalidad hay algunos derrumbes en la carretera e incluso el daño de uno de sus tramos.

Respecto a lo ocurrido el 6 de agosto en Bello, se habló también de la pérdida parcial y total de algunas viviendas. Hasta ahora se confirmó que quienes evacuaron sus viviendas recibirán un subsidio de arrendamiento.

¿Por qué suceden los desbordamientos?

El docente Juan Fernando Salazar, de la Universidad de Antioquia, declaró que hay varios factores que incrementan el riesgo: el cambio climático -entre ellos el calentamiento global que se vive a nivel mundial-, junto a la destrucción de cuencas y humedales naturales que absorben de manera natural las aguas lluvias.

“Una de las consecuencias de la urbanización en el Valle de Aburrá ha sido la destrucción e invasión de humedales y llanuras de inundación en la cuenca del río Medellín. Queda muy poco espacio entre vías, edificaciones y cauces del río y sus afluentes”, dice Salazar.

También hay un fenómeno conocido como impermeabilización, y que ocurre cuando en una ciudad se disminuyen las zonas verdes, importantes para prevenir las inundaciones dada su capacidad de absorción del agua lluvia.

“Con procesos de urbanización como los que se han dado en el Valle de Aburrá, gran parte del territorio se ha vuelto muy poco permeable. Un resultado de esto es que cuando ocurren tormentas, gran parte del agua lluvia fluye rápidamente hacia el río Medellín contribuyendo con su desbordamiento e inundaciones”, concluye Salazar.

Un fuerte caudal que se lleva todo a su paso: barras de metal, madera y residuos, fue el panorama que se vivió en Bello, municipio de Antioquia, durante la noche del 6 y la madrugada del 7 de agosto.

Por las fuertes lluvias que han ocurrido en la mayor parte del Valle de Aburrá, la quebrada La García se desbordó y ocasionó fuertes inundaciones.

Son al menos seis puntos los que concentran la contingencia: Playa Rica, Hato Nuevo, El Cairo, Panamericano, El Tapón y la Vereda el Salado. En algunos de ellos, incluso, se desplomaron varias viviendas horas después del desbordamiento.

Por ejemplo, en Playa Rica se vino abajo una casa de dos pisos que había sido evacuada previamente por los organismos de socorro ante las posibles amenazas.

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Hasta ahora, en un censo realizado por la municipalidad, se conoció de 450 familias afectadas por la contingencia. Los organismos de socorro que hicieron presencia en el sector entregaron alrededor de 200 kits con ayudas humanitarias.

“Estamos entregando ayudas humanitarias e invitando a la comunidad a que haga los desalojos pertinentes, nosotros vamos a estar acompañándolos con los subsidios y atención de la emergencia”, dio el alcalde de Bello, Óscar Andrés Pérez Muñoz.

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Actualmente, todavía continúan las labores para remover los escombros y residuos que quedaron tras el desbordamiento de La García. También se decidió cerrar la vía La Blanca, que conduce hacia el corregimiento de San Félix. La fecha de su apertura aún no ha sido confirmada, pues según la municipalidad hay algunos derrumbes en la carretera e incluso el daño de uno de sus tramos.

Respecto a lo ocurrido el 6 de agosto en Bello, se habló también de la pérdida parcial y total de algunas viviendas. Hasta ahora se confirmó que quienes evacuaron sus viviendas recibirán un subsidio de arrendamiento.

¿Por qué suceden los desbordamientos?

El docente Juan Fernando Salazar, de la Universidad de Antioquia, declaró que hay varios factores que incrementan el riesgo: el cambio climático -entre ellos el calentamiento global que se vive a nivel mundial-, junto a la destrucción de cuencas y humedales naturales que absorben de manera natural las aguas lluvias.

“Una de las consecuencias de la urbanización en el Valle de Aburrá ha sido la destrucción e invasión de humedales y llanuras de inundación en la cuenca del río Medellín. Queda muy poco espacio entre vías, edificaciones y cauces del río y sus afluentes”, dice Salazar.

También hay un fenómeno conocido como impermeabilización, y que ocurre cuando en una ciudad se disminuyen las zonas verdes, importantes para prevenir las inundaciones dada su capacidad de absorción del agua lluvia.

“Con procesos de urbanización como los que se han dado en el Valle de Aburrá, gran parte del territorio se ha vuelto muy poco permeable. Un resultado de esto es que cuando ocurren tormentas, gran parte del agua lluvia fluye rápidamente hacia el río Medellín contribuyendo con su desbordamiento e inundaciones”, concluye Salazar.