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"A pesar de todos los esfuerzos por atender las necesidades crecientes, la ayuda en Darién empieza a ser insuficiente. Las personas que migran, las comunidades locales, las agencias humanitarias, todos aquí necesitamos que la asistencia humanitaria crezca exponencialmente también", dijo a EFE la jefa de la respuesta humanitaria de la Federación Internacional de la Cruz Roja (IFRC, por sus siglas en inglés), Verónica Martínez.
En los primeros cuatro meses de este año, más de 127.000 personas en movilidad que se dirigen a EE.UU. llegaron a Panamá tras cruzar la jungla del Darién, la peligrosa frontera con Colombia, seis veces más que en el mismo lapso de 2022, que cerró con la cifra histórica de más de 248.000 migrantes transitando por la zona.
Ahora, "el número de personas migrantes arribando a Panamá vía Darién crece exponencialmente. En las últimas semanas hemos visto llegar hasta 2.000 y 3.000 personas por día, una cifra que desborda los puntos de servicio humanitario donde la Cruz Roja presta servicios", aseveró Martínez.
Panamá, que toma los datos biométricos de estos viajeros y les ofrece asistencia sanitaria y alimentación en unas estaciones situadas en las que hay presencia de más de una docena de organismos internacionales, ha alertado que de mantenerse este ritmo, 2023 podría culminar duplicando la cifra histórica del año pasado.
Martínez destacó que la mayoría de estos caminantes "llegan en un estado desolador, inhumano", y que la Cruz Roja les brinda "primeros auxilios, atención básica de salud y acceso a agua. También, artículos de higiene, información, conexión a internet y derivaciones a instituciones especializadas".
"Necesitamos ayuda sostenida en el tiempo, que pueda adaptarse a los cambios en el contexto y que esté orientada a salvar vidas y proteger la dignidad, como la que recibe la Cruz Roja gracias al apoyo continuado y los fondos de ayuda humanitaria de la Unión Europea y la Cooperación Española, entre otros actores", agregó.
La funcionaria resaltó que "hace aún más urgente" que llegue más apoyo cuanto antes el hecho de que la región está "a las puertas de una nueva temporada de lluvias y huracanes" que se extenderá desde "junio hasta noviembre" próximo, y que expondrá a los migrantes que transitan desde Panamá hasta México "a crecidas de ríos, inundaciones y tormentas".
"Estamos preparándonos para hacer frente a este escenario, pero como advertimos en marzo pasado, necesitamos aliados", dijo Martínez a EFE.
La Cruz Roja aseveró que solo ha recaudado el 5 % de los cerca de 20,3 millones de dólares que solicitó en agosto pasado mediante un llamamiento de emergencia de apoyo internacional, para prestar asistencia humanitaria a 210.000 personas a lo largo de las rutas migratorias de Centroamérica y México. EFE
gf/eat