Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Una nueva alerta se enciende en la subregión de La Mojana por cuenta de nuevos desbordamientos del río Cauca. Esta vez, la ruptura en tres nuevos puntos del dique aumenta la cifra de afectados por las inundaciones y la temporada de lluvias que atraviesa el país.
Por ello, el gobernador de ese departamento, Héctor Espinosa Oliver, amplió la declaratoria de calamidad pública para La Mojana tras las recientes emergencias.
Lea: “El tiempo es el peor enemigo”, dicen líderes de La Mojana.
Ese es el caso de Guarandá, donde se reportó que las aguas del caudal ingresaron nuevamente por el sector Cara de Gato, y siguieron hasta la región de Rabón y Gavaldá. Cabe recordar que en Cara de Gato (San Jacinto del Cauca, Bolívar), fue donde se rompió el dique que contenía el Río Cauca el 27 de agosto de 2021, y ha dejado más de 150 mil damnificados, además de generar graves afectaciones sobre zonas agrícolas y ganaderas de la subregión.
Por su parte, el alcalde de San Benito Abad, Sucre, alertó que las inundaciones llegaron hasta la carretera El Cauchal, que comunica a su municipio con San Marcos y Majagual. En uno de los cruces de la carretera se está partiendo la malla vía, lo que amenaza con dejar incomunicadas a las comunidades.
“La situación es más difícil que la ocurrida el año anterior. Tenemos tres sectores que están metiendo agua para todo el sur del Departamento. Cara de Gato nuca se cerró, ahora con más de un kilómetro de abertura”, declaró el alcalde de San Benito Abad, Manuel Cadrazco.
Por su parte, Arcesio Paredes, líder social de la región, indicó que “son nuevas afectaciones las que se han presentado en La Mojana, especialmente en la región de Rabón, donde convergen los municipios de los cuatro departamentos y hay miles de damnificados quienes reclaman una pronta atención con inversión, el pago de subsidios, los alimentos que no hay llegado más y brigadas médicas”.
Otros territorios afectados son la subregión del San Jorge sucreño, San Jacinto del Cauca y Achí, en el sur de Bolívar, y Ayapel en Córdoba.
“Esto nos obliga a aprobar un plan de acción y de inversiones para poder atender la calamidad con ayudas humanitarias, obras de maquinaria y asistencia técnica a las alcaldías y órganos que se vinculan con la atención de esta emergencia”, declaró el gobernador de Sucre, Héctor Espinosa.