Padre e hija estuvieron suspendidos seis horas sobre una tarabita en Piedecuesta
La tirolesa es utilizada por habitantes de las veredas para salir de la zona ante la falta de vías.
Una emergencia se presentó a más de 300 metros de altura, sobre una tirolesa o tarabita que se encuentra en la vereda Bore, de Piedecuesta, donde el pasado domingo 10 de marzo un padre y su hija quedaron suspendidos por fallas en el mecanismo que se presentaron sobre el sistema que permite el funcionamiento de este medio de transporte.
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“Ellos salían de la vereda y parece que el sistema de anclaje se enredó en las guayas. Quedaron a 300 metros de altura y más de 80 metros de distancia al borde del barranco”, dijo a Vanguardia Juan Carlos Garzón, miembros de la Defensa Civil de Piedecuesta, quien agregó que se trató de un hombre de 32 años y su hija de 14 años.
Al parecer, según indicó el cuerpo de Bomberos de Piedecuesta, el sistema de anclaje se enredó en las guayas, lo que hizo que las dos personas quedaran suspendidas a 80 metros del punto de llegada, por lo que el hombre sacó su celular y llamó a las autoridades para alertarlos por la emergencia.
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Al lugar llegaron miembros de la Defensa Civil y Bomberos, quienes se subieron a la línea sobre la que se suspende la tirolesa hasta el punto donde el padre y su hija quedaron atrapados. Desde allí, a través de poleas y cuerdas, lograron rescatar, primero, a la niña y luego al padre, en un proceso que tardó seis horas desde que se registró la emergencia.
“Con el conocimiento y entrenamiento que tenemos realizamos el rescate vertical con cuerdas, si corrían peligro, pero por fortuna llegamos a tiempo”, explicó Garzón.
Ante lo ocurrido, la alcaldía de Piedecuesta indicó que buscará la forma de construir una vía de acceso a la vereda para que no tengan que seguir usando la tarabita para salir de la vereda. Además, se contempla la intervención de corredores ya existentes con recursos de “convenios solidarios” para dar facilidades viales a los habitantes del sector.
Una emergencia se presentó a más de 300 metros de altura, sobre una tirolesa o tarabita que se encuentra en la vereda Bore, de Piedecuesta, donde el pasado domingo 10 de marzo un padre y su hija quedaron suspendidos por fallas en el mecanismo que se presentaron sobre el sistema que permite el funcionamiento de este medio de transporte.
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“Ellos salían de la vereda y parece que el sistema de anclaje se enredó en las guayas. Quedaron a 300 metros de altura y más de 80 metros de distancia al borde del barranco”, dijo a Vanguardia Juan Carlos Garzón, miembros de la Defensa Civil de Piedecuesta, quien agregó que se trató de un hombre de 32 años y su hija de 14 años.
Al parecer, según indicó el cuerpo de Bomberos de Piedecuesta, el sistema de anclaje se enredó en las guayas, lo que hizo que las dos personas quedaran suspendidas a 80 metros del punto de llegada, por lo que el hombre sacó su celular y llamó a las autoridades para alertarlos por la emergencia.
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“Con el conocimiento y entrenamiento que tenemos realizamos el rescate vertical con cuerdas, si corrían peligro, pero por fortuna llegamos a tiempo”, explicó Garzón.
Ante lo ocurrido, la alcaldía de Piedecuesta indicó que buscará la forma de construir una vía de acceso a la vereda para que no tengan que seguir usando la tarabita para salir de la vereda. Además, se contempla la intervención de corredores ya existentes con recursos de “convenios solidarios” para dar facilidades viales a los habitantes del sector.