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El Tribunal de los Contencioso Administrativo de Risaralda decidió, en primera instancia, cancelar la credencial de Carlos Maya como alcalde de Pereira. La acción de nulidad fue presentada en diciembre por Emerson Edilberto Jaimes y Catalina Ocampo Morales; debido a supuestas irregularidades con relación a la campaña del entonces candidato.
“Me acaban de informar sobre decisión del Tribunal de lo Contencioso Administrativo de Risaralda de declarar la nulidad de mi elección como Alcalde de Pereira”, dijo Maya. También indicó que el proceso seguirá ante el Consejo de Estado, donde buscará demostrar que no hubo ilegalidad en su elección.
Me acaban de informar sobre decisión del Tribunal de lo Contencioso Administrativo de Risaralda de declarar la nulidad de mi elección como Alcalde de Pereira. Ahora el proceso seguirá ante el Consejo de Estado para demostrar que no existió ilegalidad como lo dijo la Procuraduría.
— Carlos Maya (@MayaAlcaldePei) September 1, 2020
Esteban gañan, concejal de Pereira por el Partido Alianza Verde, recordó por medio de su cuenta de Twitter que el alcalde tiene derecho a apelar la decisión del Tribunal Contencioso Administrativo “porque este es un fallo en primera instancia el cual al ser apelado sube en segunda instancia al consejo de estado quien confirmará la decisión o la revocará”.
Esta decisión se dio por el uso de la aplicación “Kontacto”, mediante la cual se habría cometido constreñimiento al elector. Con esta plataforma presuntamente se obligó a funcionarios y contratistas de la administración de Juan Pablo Gallo, exalcalde de Pereira, a referir posibles votantes para Maya. La Procuraduría suspendió por tres meses al exalcalde Gallo al confirmar su apoyo al entonces candidato a la alcaldía.
De acuerdo con el testimonio dado por Luis Carlos Rúa y otros dos contratistas de la Alcaldía a La Liga Contra el Silencio, hubo presión para participar de manera activa en la campaña de Maya: contratistas y funcionarios de planta debían poner a disposición de la campaña, asistir a eventos y entregar nombres de personas que pudieran votar por los candidatos.
“Cuando uno va a las reuniones lo primero que le solicitan es entregar el celular para que le actualicen los referidos, de ahí para allá uno no sabe qué le hacen al celular porque lo conectan a un computador”, dijo para La Liga contra el Silencio una contratista. Ella explicó que los hacían instalar una aplicación llamada “Kontacto”, con la que presuntamente se rastreaba la labor de los contratistas en favor de la campaña.
En dicha aplicación, se tenían datos como cuántos “referidos” ha conseguido, también nombre, número de cédula, dirección, y puesto de votación de cada uno. Además, se podían publicar mensajes prediseñados (usando redes sociales personales).
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