Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Un joven de 22 años es acusado de participar en el asesinato del músico Esnaider Javier Castillo, de 24 años, quien el pasado 27 de diciembre fue atacado en una de las calles centrales del municipio de Barbacoas, en Nariño.
El hombre, identificado como alias Chamaquito, sería el líder de sicarios del Frente Óliver Sinisterra de las disidencias de las Farc en la zona y estaría involucrado en el asesinato de Castillo, que era la voz principal de la Agrupación Changó, que participó en la más reciente edición del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez en Cali.
Aunque no se conocen las razones del asesinato, se manejan dos hipótesis alrededor del caso. La primera es un posible homicidio, por cuenta de una disputa entre grupos armados que estarían reclutando a jóvenes en el municipio. Castillo, junto a su agrupación que también realiza acciones sociales, había trabajado para alejar a los menores de la violencia.
Por el otro lado, no se descarta otra versión que señala que el asesinato se habría dado por una confusión, dado que Castillo estaría en una videollamada y el atacante, aparentemente, creyó que lo estaban grabando.
Esnaider era oriundo de Barbacoas, pero desde hace algunos años vivía en Cali. Además de ser el cantante principal de la agrupación, era un investigador que desde hace más de una década se dedicó al rescate del patrimonio cultural del Pacífico Sur y con ello, de los jóvenes que podrían ser víctimas de la violencia.
Su asesinato causó el repudio tanto de artistas nacionales como de la comunidad que acompañó el entierro con una masiva procesión a ritmo de arrullos.
Tras el homicidio, Ana Copete, directora del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, resaltó que “En el pacífico la paz no es un juego político, es un clamor de todos”, mientras que la agrupación Changó publicó en sus redes: “El juglar de las músicas de marimba y cantos tradicionales ha partido de este mundo a la gloria celestial. Su voz, su magia, su personalidad y sus virtudes artísticas han sido silenciadas por las garras de la violencia que día tras día azota a las comunidades de los pueblos pacífico sur colombiano, truncando los sueños de las juventudes de esta bella región”.
Nota del editor: se retituló el artículo para precisar la vinculación del acusado con el crimen.