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Más de la mitad de las mesas de votación de Ricaurte, en Nariño, no alcanzaron a ser abiertas por condiciones de orden público, que se presentaron en la mañana de este 29 de octubre, luego de que manifestantes llegaron al lugar exigiendo suspender las elecciones en el municipio.
Según indicó el registrador Alexander Vega, “solo se está votando en el área rural. La cabecera municipal no ha podido ser controlada por la cantidad de manifestantes”. Por ello, el Comité de Seguimiento Electoral de Nariño solicitó formalmente “suspender las elecciones en todo el municipio”.
Las manifestaciones se presentaron luego de que se conocieron amenazas contra el candidato a la alcaldía Jaime Caicedo, quien se presentó a la alcaldía de Ricaurte por el partido MAIS. Al parecer, los responsables serían disidencias de las Farc en la zona, por lo que exigían mayor presencia de la Policía y el Ejército.
“El registrador tomó la decisión de suspender las elecciones en el municipio de Ricaurte porque no hay las condiciones, ni las garantías para que los ciudadanos puedan ejercer el derecho al voto”, dijo el alcalde del municipio, Éder Burgos.
A la par, la gobernación de Nariño indicó que en nueve puntos del departamento se tuvieron que reubicar los puestos de votación. “Bien porque ya no hay habitantes en los corregimientos y en otros casos por situaciones de desplazamientos masivos de población”, aseguró el delegado del registrador nacional en Nariño, Ricardo Manuel Ruales.
Entre estos se encuentra la localidad de Lozano Torrijos Cuangara, en Olaya Herrera; en Quiribial, en el municipio de Mosquera; en Tabacal y Elsan de Frontera en Tumaco; en el corregimiento San Pablo, de Vijagual, y en los corregimientos de El Decio, El Salado, Betania y San Diego en Samaniego, donde hubo desplazamientos forzados en agosto.