El mal momento de comerciantes del parque Arví tras caída de cabina del Metrocable

La caída de una cabina del Metrocable en Medellín, que se presentó el pasado 26 de junio, que dejó un muerto y 20 heridos, no solo ha traído inconvenientes para los usuarios que se vieron afectados con el cierre de la línea K del sistema, sino además para los comerciantes del parque Arvi, quienes señalan que sus ventas se han reducido más del 80 %, por la baja cantidad de turistas que ahora llegan al lugar.

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La principal razón es que uno de los principales puntos de ingreso es la línea L, que une al parque Arvi con Santo Domingo, y que se conecta con la línea K, que continúa cerrada por las investigaciones y pruebas que se están haciendo para garantizar que una nueva tragedia no se vuelva a presentar en el lugar.

Al respecto, Elkin Rincón, representante del Mercado Arvi, indicó que esto ha llevado a que se reduzcan las visitas en un 75% y por consiguiente las ventas dentro del parque. “Se invierte cerca de 250.000 pesos para tener en un día venta de 450 o 500.000 pesos, pero no se vende ni 50.000 pesos. Entonces esto lo que ha hecho es descapitalizar muchas unidades productivas”.

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Por su parte, Daniel Saldarriaga, uno de los comerciantes de la zona, señaló a El Colombiano: “Ya casi no se ven turistas. A nosotros nos salva que no pagamos arriendo porque el local es propio, sino... ¡Juepucha! Ya por obligación nos hubiera tocado cerrar. Acá tenemos siete trabajadores y nos hemos visto a gatas para pagarles sus quincenas”.

Ante esto, los comerciantes recordaron que si bien la línea K del Metrocable está cerrada, la Línea L no, por lo que los turistas pueden tomar un alimentador desde Acevedo para conectarse con la estación del Santo Domingo, donde pueden tomar el cable. De igual forma, se puede tomar uno de los buses Buenos Aires- Santa Elena o Perico o Pantanillo-Piedras Blanca.

Por último, los comerciantes le piden al Metro de Medellín establecer diálogos para reducir el valor del costo del tiquete hasta el parque Arvi, que hoy cuesta alrededor de $14.000. Aunque el Metro indicó que ya se han realizado la mayoría de las pruebas de seguridad sobre la Línea K, por el momento no se ha dado una fecha estimada de cuando se podría retomar el servicio.

La caída de una cabina del Metrocable en Medellín, que se presentó el pasado 26 de junio, que dejó un muerto y 20 heridos, no solo ha traído inconvenientes para los usuarios que se vieron afectados con el cierre de la línea K del sistema, sino además para los comerciantes del parque Arvi, quienes señalan que sus ventas se han reducido más del 80 %, por la baja cantidad de turistas que ahora llegan al lugar.

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Ante esto, los comerciantes recordaron que si bien la línea K del Metrocable está cerrada, la Línea L no, por lo que los turistas pueden tomar un alimentador desde Acevedo para conectarse con la estación del Santo Domingo, donde pueden tomar el cable. De igual forma, se puede tomar uno de los buses Buenos Aires- Santa Elena o Perico o Pantanillo-Piedras Blanca.

Por último, los comerciantes le piden al Metro de Medellín establecer diálogos para reducir el valor del costo del tiquete hasta el parque Arvi, que hoy cuesta alrededor de $14.000. Aunque el Metro indicó que ya se han realizado la mayoría de las pruebas de seguridad sobre la Línea K, por el momento no se ha dado una fecha estimada de cuando se podría retomar el servicio.