El problema por el que se declaró la emergencia ambiental en el relleno La Pradera

El relleno sanitario La Pradera se encuentra en el municipio de Donmatías, a 57 kilómetros de Medellín.

Foto: Alcaldía de Medellín

Una emergencia ambiental se declaró en Medellín por las condiciones en que se encuentra el relleno sanitario de La Pradera, al que diariamente llegan 3.500 toneladas de basura tanto de la capital antioqueña como de 40 municipios del departamento. Junto a la declaratoria, el alcalde Federico Gutiérrez anunció que pedirá la capitalización de la empresa Emvarias, que se encarga del lugar, en busca de rápidas soluciones al problema.

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“Estamos en una situación delicada. Nos dejaron un desastre absoluto”, indicó el mandatario, quien añadió que con la capitalización por $350.000 millones se buscan abrir nuevos espacios para disponer de la basura, por lo menos hasta septiembre. De lo contrario, habría una crisis y la zona más cercana para disponer de los residuos de Medellín sería Cali.

¿Qué está pasando en La Pradera?

El relleno sanitario de La Pradera es un punto de recepción de basuras que se abrió en 2003, en el municipio de Donmatías, a 57 kilómetros de Medellín. Allí se disponen los residuos de la capital antioqueña, pero también la de municipios como Bello, Envigado, Itagüí, Girardota y Rionegro, entre otros, lo que hace que a diario lleguen 3.500 toneladas de basura, que es aproximadamente la mitad de lo que recibe Doña Juana, en Bogotá.

El proyecto se dividió en cuatro fases, cada una compuesta por un vaso de disposición de residuos, que se han venido cerrando conforme se han ido llenando. En este momento, en La Pradera se opera sobre la tercera fase, que es el vaso Altair, en donde desde hace más de seis meses, Corantioquia ha venido lanzando alertas por la inestabilidad del terreno y consiguiente riesgo de colapso de la zona de disposición.

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Según indicó el gerente de Emvarias, Gustavo Castaño, la negligencia en la disposición de las basuras como de los lixiviados (los líquidos que sueltan las basuras) ha llevado a movimientos en masas y a que ya no se pueda segur usando el vaso Altair, por lo que habló que solo hasta abril podría estar habilitado.

Pero como esta alerta no es nueva, o bueno, se sabía que el vaso estaba llegando a su máxima capacidad, anteriores administraciones pidieron la licencia ambiental para habilitar la cuarta fase, es decir, abrir el vaso La Piñuela. La licencia se entregó en julio de 2022, pero la administración de Daniel Quintero no terminó las obras de adecuación que debieron estar listas para 2023.

“Hoy, por esa irresponsabilidad en el manejo de lo público, estamos cerca de una crisis sanitaria sin precedentes. No priorizaron la inversión, pero sí un contrato de cargue lateral por $251.000 millones con unos empresarios cuestionados”, aseveró Federico Gutiérrez.

¿Por qué se declaró la emergencia ambiental en Medellín?

La alcaldía de Medellín decidió declarar la emergencia ambiental para tomar acciones inmediatas y así ampliar la vida útil del vaso Altair, mientras se avanzan en las adecuaciones de La Piñera. De acuerdo con denuncias hechas por El Colombiano en septiembre del año pasado, hay varios problemas en el lugar, como que uno de los pozos de extracción de lixiviados colapsó, por el movimiento de masas, que también hizo que los residuos ejercieran presión sobre uno de diques que sostiene el vaso.

Aunque la idea de Emvarios, era “adecuar un espacio en la parte alta del vaso con capacidad para recibir residuos”, según reseñó el medio, mientras entraba en operación La Piñuela, lo cierto era que ni habían comenzado a remover la cobertura vegetal ni a adecuar la nueva zona para disponer la basura.

Ante esto, la actual alcaldía de Medellín anunció reuniones con el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Martínez, así como inmediatos trabajos de adecuación del vaso Altair, al que le queda mes y medio de uso. El plan es habilitar zonas aledañas para ampliar la vida útil hasta septiembre. Además, se estudia reabrir el vaso La Música (que es el de la segunda fase) para garantizar más espacio para disponer la basura hasta enero de 2025.

Estas acciones le dan un año a Emvarios para invertir $700 mil millones, entre los que se cuentan los $350 mil millones que el alcalde Gutiérrez pidió a EPM para capitalizar la empresa, para poner a operar el vaso la Piñuela el primer bimestre del próximo año. De no hacerse estos trabajos con la precisión que se requiere, podría generar emergencias dentro del relleno, como un colapso de las basuras, pero también a una crisis en la región, dado que el próximo lugar más cercano para disponer sus basuras sería en el Valle del Cauca.

“Si cuando el camión de basuras se demora en pasar dos horas por la ciudad y se genera un caos absoluto, ahora imagínense ustedes donde se llegue el momento donde no se tenga dónde disponer de los residuos sólidos”, dijo Federico Gutiérrez.

Por último, el mandatario hablo de la necesidad de concientizar a los ciudadanos de reciclar, lo que implica la formación desde las escuelas. “Vamos a necesitar que se empiecen a dar desde ya soluciones de nuevas alternativas para tratar las basuras, como temas de incineración de residuos sólidos”.