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La Fiscalía de Milán, en Italia, abrió una investigación al empresario italiano residente en Colombia, Marco Di Nunzio, que afirma ser otro heredero del ex primer ministro Silvio Berlusconi, fallecido el pasado junio.
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Los fiscales Roberta Amadeo y Marcello Viola investigarán si Di Nunzio ha incurrido en el delito de falsedad documental, según informan medios como la agencia Ansa.
El italiano residente en Colombia ha depositado en una notaría de Nápoles un testamento firmado, según él, por el magnate y tres veces primer ministro Berlusconi, en el que le habría dejado el 2 % de las acciones del grupo de la familia, Fininvest, y otros bienes, según indicó a varios medios.
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Di Nunzio siempre ha afirmado ser amigo de Berlusconi y en 2013 intentó presentarse a la presidencia de la región de Lombardía con la lista de “Movimiento Bunga Bunga”, excluida por la comisión del Tribunal de Apelación de Milán por supuestas irregularidades en materia de firmas.
Según el testamento en manos de Di Nunzio, Berlusconi le habría dejado el 2 % de las acciones de Fininvest, por un valor aproximado de 26 millones de euros, además de todas las acciones de la sociedad propietaria de las dos casas que Berlusconi tenía en Antigua, en el Caribe, el barco "Principessa VaiVia" y también otras embarcaciones.
Con la publicación del testamento, el empresario también habría formalizado el requerimiento para los cinco hijos de Berlusconi, solicitando la entrada inmediata en posesión de los bienes.
La historia del italiano en Medellín se conoció luego de que su familia denunció el robo de 300.000 dólares en efectivo, una cadena de diamantes avaluada en 400 millones de pesos, documentos diplomáticos y dos celulares, que trasportaba el hombre en una camioneta.
Aunque Di Nunzio aseguró que era diplomático italiano, la embajada de dicho país lo negó, mientras que las autoridades indicaron que no se pudo comprobar el hurto de la cadena de diamantes. Junto a esto, el hombre habló de la herencia y relacionó el asalto con una presunta presión para que no la reclamara.
El testamento oficial de Berlusconi, que se abrió tras su muerte, estaba fechado el 19 de junio de 2022, cuando el político ya estaba enfermo de leucemia, y deja como herederos de su imperio, Fininvest, a sus cinco hijos: Pier Silvio, Marina, Bárbara, Eleonora y Luigi.
Además, Berlusconi legó 30 millones de su fortuna a Marcello Dell'Utri, su mano derecha, cofundador de su partido, Forza Italia, y condenado a siete años de prisión por vínculos con la mafia siciliana Cosa Nostra.
Y también donó 100 millones a su hermano Pablo y otros 100 millones a la que fue su última compañera sentimental, Marta Fascina.