Histórico: se aprobó la matrícula cero en universidades públicas de Medellín
Se logró, también, que el 30 % de los cupos fueran garantizados exclusivamente para personas trans y no binarias sin importar su edad.
Medellín se convirtió en el primer municipio de Colombia en adoptar la matrícula cero dentro de su política pública dentro de las universidades públicas, con lo que se busca que los jóvenes de todos los estratos socioeconómicos de la capital antioqueña puedan acceder a programas de educación superior de manera gratuita. Además, el 30 % de los cupos se designó para la población trans y no binaria, garantizando así el derecho para una población históricamente vulnerada.
Lea también: “Fue un viaje de trabajo”: Daniel Quintero sobre su ida a Italia.
“Exigimos lo mismo que ustedes tienen”, gritaban desde las graderías del Concejo de Medellín algunas mujeres trans que asistieron a la sesión. “Hemos sido rechazadas, marginadas. Quienes tenemos más de 28 años y queremos estudiar para cambiar nuestras posibilidades, no podemos hacerlo”, gritaban otras en medio de pancartas con arengas políticas.
“Las personas trans han sido tan invisibilizadas, que no existen registros de sus ingresos a la educación superior. Existe una transfobia en el sistema educativo. La enmienda quedó como garantía de acciones afirmativas y es un hito porque por primera vez está en una cuerdo municipal un cupo específico para personas trans y no binarias puedan acceder a educación superior sin limite de edad y además con priorización con beneficios de apoyos de permanencia”, dijo la concejala Dora Saldarriaga, por el movimiento Estamos Listas.
Ahora, respecto a la aprobación de la matrícula cero en general, con 18 de los 21 concejales que votaron a favor, se pretende impactar alrededor de 500.000 estudiantes al año, entre el 2022 y 2031, para lo que se necesitará de una inversión de 2,9 billones de pesos.
La Agencia de Educación Postsecundaria de Medellín (Sapiencia) será quien administre los recursos para transferirlos a las Instituciones de Educación Superior Públicas del Distrito y el Departamento.
¿Cuáles son las diferencias entre lo pactado en el Concejo de Medellín y el resto del país?
A nivel nacional, solo pueden acceder al beneficio de matrícula cero quienes sean menores de 28 años, quienes habiten en estratos 1, 2 y 3 y quienes no tengan previamente un título profesional universitario o de posgrado.
Asimismo, una vez los estudiantes acceden al beneficio, este no cubre sus derechos académicos, pecuniarios o complementarios (bienestar, seguro y carné estudiantil).
Ahora, mediante el acuerdo 087/2022, se está previsto que en Medellín las personas mayores de 28 años puedan acceder a la matrícula cero sin importar su estrato socioeconómico y tampoco cuenten con títulos de educación superior previos.
También se garantizará sostenimiento para población vulnerable, como las personas trans y no binarias, al cubrir sus gastos para material académico, transporte y alimentación.
¿Qué pasará con las personas trans?
El movimiento feminista Estamos Listas, principales ponentes del proyecto para que el 30 % de los cupos fueran garantizados para personas trans, tendrán un sancocho el 3 de septiembre en uno de los barrios más icónicos para la población LGTBIQ+ en Medellín: Barbacoas, en el centro de la ciudad, detrás de la iglesia Metropolitana.
El motivo será la socialización del proyecto que ahora le permitirá a mujeres y hombres trans, junto a personas no binarias, acceder a la educación superior pública de manera gratuita. Uno de los principales retos será garantizar la permanencia de quienes accedan a este derecho para convertirse en futuros profesionales.
Medellín se convirtió en el primer municipio de Colombia en adoptar la matrícula cero dentro de su política pública dentro de las universidades públicas, con lo que se busca que los jóvenes de todos los estratos socioeconómicos de la capital antioqueña puedan acceder a programas de educación superior de manera gratuita. Además, el 30 % de los cupos se designó para la población trans y no binaria, garantizando así el derecho para una población históricamente vulnerada.
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“Exigimos lo mismo que ustedes tienen”, gritaban desde las graderías del Concejo de Medellín algunas mujeres trans que asistieron a la sesión. “Hemos sido rechazadas, marginadas. Quienes tenemos más de 28 años y queremos estudiar para cambiar nuestras posibilidades, no podemos hacerlo”, gritaban otras en medio de pancartas con arengas políticas.
“Las personas trans han sido tan invisibilizadas, que no existen registros de sus ingresos a la educación superior. Existe una transfobia en el sistema educativo. La enmienda quedó como garantía de acciones afirmativas y es un hito porque por primera vez está en una cuerdo municipal un cupo específico para personas trans y no binarias puedan acceder a educación superior sin limite de edad y además con priorización con beneficios de apoyos de permanencia”, dijo la concejala Dora Saldarriaga, por el movimiento Estamos Listas.
Ahora, respecto a la aprobación de la matrícula cero en general, con 18 de los 21 concejales que votaron a favor, se pretende impactar alrededor de 500.000 estudiantes al año, entre el 2022 y 2031, para lo que se necesitará de una inversión de 2,9 billones de pesos.
La Agencia de Educación Postsecundaria de Medellín (Sapiencia) será quien administre los recursos para transferirlos a las Instituciones de Educación Superior Públicas del Distrito y el Departamento.
¿Cuáles son las diferencias entre lo pactado en el Concejo de Medellín y el resto del país?
A nivel nacional, solo pueden acceder al beneficio de matrícula cero quienes sean menores de 28 años, quienes habiten en estratos 1, 2 y 3 y quienes no tengan previamente un título profesional universitario o de posgrado.
Asimismo, una vez los estudiantes acceden al beneficio, este no cubre sus derechos académicos, pecuniarios o complementarios (bienestar, seguro y carné estudiantil).
Ahora, mediante el acuerdo 087/2022, se está previsto que en Medellín las personas mayores de 28 años puedan acceder a la matrícula cero sin importar su estrato socioeconómico y tampoco cuenten con títulos de educación superior previos.
También se garantizará sostenimiento para población vulnerable, como las personas trans y no binarias, al cubrir sus gastos para material académico, transporte y alimentación.
¿Qué pasará con las personas trans?
El movimiento feminista Estamos Listas, principales ponentes del proyecto para que el 30 % de los cupos fueran garantizados para personas trans, tendrán un sancocho el 3 de septiembre en uno de los barrios más icónicos para la población LGTBIQ+ en Medellín: Barbacoas, en el centro de la ciudad, detrás de la iglesia Metropolitana.
El motivo será la socialización del proyecto que ahora le permitirá a mujeres y hombres trans, junto a personas no binarias, acceder a la educación superior pública de manera gratuita. Uno de los principales retos será garantizar la permanencia de quienes accedan a este derecho para convertirse en futuros profesionales.