Los escenarios de riesgo para los municipios aledaños a Hidroituango
La Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) indicó que los municipios deben definir rutas y planes de evacuación. El Gobierno Nacional dio más plazo para encender las primeras turbinas.
El próximo sábado cinco de noviembre se instalará el Puesto de Mando Unificado en Hidroituango para analizar las pruebas y todo lo relacionado con la gestión del riesgo para los municipios que se encuentran aguas abajo de la represa, previo a la apertura de las dos primeras compuertas.
Esto se hará luego de que el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, anunció que el 30 de noviembre ya no será el tiempo límite para iniciar la operación de las dos primeras unidades de generación de energía, como se había previsto para evitar multas la Comisión Reguladora de Energía, por el incumplimiento de la cuota energética.
“El 30 de noviembre no es ya nuestra fecha, que nuestra fecha es la que determine las pruebas, el modelo de operación. Puede ser incluso antes, pero puede ser después, va a ser el modelo de entrada segura en operación el que va a determinar, entonces ya no está en nuestro radar esa fecha. Lo único importante en este caso es el encendido seguro”, dijo Quintero.
En medio de esto, no solo se ha pronunciado la alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia, sino además la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), quienes han reiterado lo dicho por el presidente, sobre privilegiar la vida de los habitantes que se encuentran en riesgo.
“Hemos realizado tres reuniones: una en Hidroituango, otra en Medellín y el próximo sábado realizaremos una en Puerto Valdivia con el propósito de que EPM presente el plan de contingencia para salvaguardar la vida de más de 38 mil personas que se encuentran río abajo”, dijo Javier Pava, director de la Ungrd.
Es por ello que se evaluará la posibilidad de declarar la alerta naranja en los municipios de Puerto Valdivia, Tarazá, Puerto Antioquia y Cáceres y/o realizar evacuaciones preventivas, ante el desconocimiento del comportamiento del macizo rocoso, que podría poner en riesgo el inicio de la operación.
“Consideramos que en este momento tan sensible es importante tomar así sea unas medidas adicionales y exageradas, unas medidas de precaución, por si llega a suceder algo que se escape de la capacidad y el control que pueda tener. Esperamos que la capacidad de control que tengan los responsables del proyecto sea suficiente para garantizar la seguridad del proyecto y eso también de seguridad aguas abajo”, indicó Pava, quien también se refirió a los altos niveles del río Cauca por cuenta de la temporada de lluvias.
Los escenarios de riesgo
El plan de manejo de desastres planteado por EPM, plantea tres escenarios de alto riesgo para los municipios aledaños a Hidroituango. El primero plantea fallas en la presa, que pueda generar un caudal de 368.000 m³/s aguas abajo, el cual sería el peor riesgo, dado que en 45 minutos arrasaría con Puerto Valdivia y en 15 horas llegaría hasta Nechí.
El segundo escenario sería por movimientos en masa en las vías del área de influencia cercana a las obras principales del proyecto, mientras que el tercero plantea la desobstrucción de la galería auxiliar de desviación o túnel de desviación derecho, lo que aumentaría el caudal a 8.100 m³/s aguas abajo. Aunque este riesgo es de menor envergadura, las proyecciones indican que podría afectar hasta los municipios de La Mojana.
Es por ello que dentro de las medidas en los municipios, además de los planes de mitigación, desde la Ungrd se ha pedido tener claras las rutas y los planes de evacuación, así como no se descarta la evacuación de las comunidades aledañas mientras entra en operación Hidroituango. Así como EPM tiene prevista toda una ruta para la comunicación y atención de posibles emergencias, que incluye a la Gobernación y a la Dirección de Gestión del Riesgo.
“Con el fin de garantizar la efectividad de la respuesta, el presente plan de emergencias y contingencia PEC deberá ponerse a prueba mínima una vez al año y en articulación con los sistemas de calidad de la entidad, a través de ejercicios de escritorio o prácticos en un ambiente controlado”, indica el plan de desastres de EPM.
Sumado a esto, la empresa calculó el tiempo que los municipios más cercanos se podrían inundar ante posibles avalanchas causadas por los escenarios mencionados, lo que afectaría a los municipios del bajo Cauca: Valdivia, Tarazá, Cáceres, Caucasia y Nechí, en Antioquia; así como los municipios de la subregión La Mojana: Ayapel, Pueblo Nuevo, Buenavista, La Apartada y Montelibano en Córdoba, junto con Los Caimito, Guaranda, Majagual, San Benito Abad, San Marcos, Sucre y Galeras en Sucre, y los municipios Achí, Magangué, San Jacinto del Cauca, Montecristo, Pinillos, Mómpos y Cicuco en Bolívar.
Además, una eventual emergencia pondría en riesgo a 113.500 personas y 28.584 viviendas del Bajo Cauca (con estimaciones a 2017), así como a cerca de 240.926 personas y 49041 viviendas de La Mojana, por lo que cualquier escenario de riesgo en Hidroituango expone a 354.426 personas y viviendas 77.625 de los municipios cuenca abajo del río Cauca.
Por ahora restará esperar el análisis que haga en el PMU y las pruebas que restan para la puesta en marcha, pues según indicó la alcaldía de Medellín, el 31 de octubre finalizó la presurización de la unidad hidráulica que permitirá poner en funcionamiento la unidad 1, mientras que en los últimos días terminaron las pruebas de las compuertas de aducción de las dos generadoras que se encenderán.
Frente a los escenarios de riesgo, el gerente de EPM, Jorge Carrillo, ha advertido que pese a que se contemplan y se tienen acciones previstas, la posibilidad de que algo así ocurra es muy baja, por lo que en un llamado a la calma indicó que “la etapa difícil es la prueba para la entrada de operaciones. Si esas máquinas tuvieran algún tipo de vibración anormal, nosotros no es que tentemos a la suerte a ver cómo se comporta el macizo, sino lo que vamos a hacer es parar, cerrar el paso del agua y hacer los ajustes hasta que podamos hacer el encendido seguro del proyecto; no va a haber riesgo de una creciente ni nada de eso”.
El próximo sábado cinco de noviembre se instalará el Puesto de Mando Unificado en Hidroituango para analizar las pruebas y todo lo relacionado con la gestión del riesgo para los municipios que se encuentran aguas abajo de la represa, previo a la apertura de las dos primeras compuertas.
Esto se hará luego de que el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, anunció que el 30 de noviembre ya no será el tiempo límite para iniciar la operación de las dos primeras unidades de generación de energía, como se había previsto para evitar multas la Comisión Reguladora de Energía, por el incumplimiento de la cuota energética.
“El 30 de noviembre no es ya nuestra fecha, que nuestra fecha es la que determine las pruebas, el modelo de operación. Puede ser incluso antes, pero puede ser después, va a ser el modelo de entrada segura en operación el que va a determinar, entonces ya no está en nuestro radar esa fecha. Lo único importante en este caso es el encendido seguro”, dijo Quintero.
En medio de esto, no solo se ha pronunciado la alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia, sino además la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), quienes han reiterado lo dicho por el presidente, sobre privilegiar la vida de los habitantes que se encuentran en riesgo.
“Hemos realizado tres reuniones: una en Hidroituango, otra en Medellín y el próximo sábado realizaremos una en Puerto Valdivia con el propósito de que EPM presente el plan de contingencia para salvaguardar la vida de más de 38 mil personas que se encuentran río abajo”, dijo Javier Pava, director de la Ungrd.
Es por ello que se evaluará la posibilidad de declarar la alerta naranja en los municipios de Puerto Valdivia, Tarazá, Puerto Antioquia y Cáceres y/o realizar evacuaciones preventivas, ante el desconocimiento del comportamiento del macizo rocoso, que podría poner en riesgo el inicio de la operación.
“Consideramos que en este momento tan sensible es importante tomar así sea unas medidas adicionales y exageradas, unas medidas de precaución, por si llega a suceder algo que se escape de la capacidad y el control que pueda tener. Esperamos que la capacidad de control que tengan los responsables del proyecto sea suficiente para garantizar la seguridad del proyecto y eso también de seguridad aguas abajo”, indicó Pava, quien también se refirió a los altos niveles del río Cauca por cuenta de la temporada de lluvias.
Los escenarios de riesgo
El plan de manejo de desastres planteado por EPM, plantea tres escenarios de alto riesgo para los municipios aledaños a Hidroituango. El primero plantea fallas en la presa, que pueda generar un caudal de 368.000 m³/s aguas abajo, el cual sería el peor riesgo, dado que en 45 minutos arrasaría con Puerto Valdivia y en 15 horas llegaría hasta Nechí.
El segundo escenario sería por movimientos en masa en las vías del área de influencia cercana a las obras principales del proyecto, mientras que el tercero plantea la desobstrucción de la galería auxiliar de desviación o túnel de desviación derecho, lo que aumentaría el caudal a 8.100 m³/s aguas abajo. Aunque este riesgo es de menor envergadura, las proyecciones indican que podría afectar hasta los municipios de La Mojana.
Es por ello que dentro de las medidas en los municipios, además de los planes de mitigación, desde la Ungrd se ha pedido tener claras las rutas y los planes de evacuación, así como no se descarta la evacuación de las comunidades aledañas mientras entra en operación Hidroituango. Así como EPM tiene prevista toda una ruta para la comunicación y atención de posibles emergencias, que incluye a la Gobernación y a la Dirección de Gestión del Riesgo.
“Con el fin de garantizar la efectividad de la respuesta, el presente plan de emergencias y contingencia PEC deberá ponerse a prueba mínima una vez al año y en articulación con los sistemas de calidad de la entidad, a través de ejercicios de escritorio o prácticos en un ambiente controlado”, indica el plan de desastres de EPM.
Sumado a esto, la empresa calculó el tiempo que los municipios más cercanos se podrían inundar ante posibles avalanchas causadas por los escenarios mencionados, lo que afectaría a los municipios del bajo Cauca: Valdivia, Tarazá, Cáceres, Caucasia y Nechí, en Antioquia; así como los municipios de la subregión La Mojana: Ayapel, Pueblo Nuevo, Buenavista, La Apartada y Montelibano en Córdoba, junto con Los Caimito, Guaranda, Majagual, San Benito Abad, San Marcos, Sucre y Galeras en Sucre, y los municipios Achí, Magangué, San Jacinto del Cauca, Montecristo, Pinillos, Mómpos y Cicuco en Bolívar.
Además, una eventual emergencia pondría en riesgo a 113.500 personas y 28.584 viviendas del Bajo Cauca (con estimaciones a 2017), así como a cerca de 240.926 personas y 49041 viviendas de La Mojana, por lo que cualquier escenario de riesgo en Hidroituango expone a 354.426 personas y viviendas 77.625 de los municipios cuenca abajo del río Cauca.
Por ahora restará esperar el análisis que haga en el PMU y las pruebas que restan para la puesta en marcha, pues según indicó la alcaldía de Medellín, el 31 de octubre finalizó la presurización de la unidad hidráulica que permitirá poner en funcionamiento la unidad 1, mientras que en los últimos días terminaron las pruebas de las compuertas de aducción de las dos generadoras que se encenderán.
Frente a los escenarios de riesgo, el gerente de EPM, Jorge Carrillo, ha advertido que pese a que se contemplan y se tienen acciones previstas, la posibilidad de que algo así ocurra es muy baja, por lo que en un llamado a la calma indicó que “la etapa difícil es la prueba para la entrada de operaciones. Si esas máquinas tuvieran algún tipo de vibración anormal, nosotros no es que tentemos a la suerte a ver cómo se comporta el macizo, sino lo que vamos a hacer es parar, cerrar el paso del agua y hacer los ajustes hasta que podamos hacer el encendido seguro del proyecto; no va a haber riesgo de una creciente ni nada de eso”.