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En una calle del barrio Belén, en Medellín, las autoridades encontraron tendido en el piso a Salo Lloyd, de 60 años, un canadiense que presentaba un fuerte golpe en la cabeza y quien pese a que alcanzó a ser trasladado a un centro asistencial no sobrevivió.
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El canadiense fue encontrado sobre las 9:30 p.m. del pasado lunes 12 de febrero, aun con vida, por uniformados que patrullaban la zona y que lo llevaron a la Unidad Intermedia de Belén, de donde lo trasladaron al Hospital General de Medellín, al que llegó sin signos vitales.
Las autoridades desconocen lo que le ocurrió al extranjero, por lo que intentan determinar si el golpe se lo propinó otra persona o corresponde a una caída. Asimismo, se busca determinar si el canadiense era turista o vivía en Medellín.
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Esta es una de las siete muertes que se han registrado de extranjeros en la ciudad en diferentes circunstancias en lo que va corrido del año. En dos de los casos, los hombres han caído de edificios, mientras que la muerte de Turney Patricia Gail, de 73 años, se dio luego de que participó en una ceremonia en la que tomó yagé, en el municipio de Bello.
En los casos del estadounidense Anthony G. López, de 29 años, y el holandés Kenneth Jules de Fares, de 57 años, los cuerpos fueron encontrados en habitaciones de los hoteles que se hospedaban, luego de que fueron vistos ingresando a estos lugares con mujeres.
Por último, está el caso del docente inglés Dakarai Earl Cobb, de 47 años, quien fue encontrado dentro la vivienda que se hospedaba en el barrio Santa Lucía de la capital antioqueña.
Ante la alerta que lanzó Estados Unidos, tras el asesinato de 44 turistas el año pasado en Medellín en 2023, y la racha violenta que se registra en la ciudad, la alcaldía lanzó un protocolo, con el que indicaron que buscan reforzar la prevención alertando a los turistas de sus posibles riesgos, así como se incluyó una línea de salud mental.