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María Celeste Taborda, una niña de dos años y medio, falleció tras caer accidentalmente al río Nechí, en el corregimiento de Cargueros, Nechí, Antioquia. La niña jugaba cerca de la orilla junto a otro menor de edad cuando resbaló y desapareció en el afluente.
Sus acompañantes alertaron a familiares y autoridades, lo que dio inicio a una búsqueda en el río. A pesar de los esfuerzos de los organismos de socorro por encontrarla con vida, el cuerpo de la niña fue encontrado en el municipio de San Jacinto del Cauca, Bolívar, por un pescador, el martes 7 de enero.
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Familiares se trasladaron al lugar para confirmar su identidad. Luego, el cuerpo fue trasladado a Medicina Legal en Caucasia para los procedimientos correspondientes.
Las autoridades locales hicieron un llamado urgente a la comunidad para extremar las medidas de seguridad cerca de cuerpos de agua. Insisten en que los padres y cuidadores deben mantener una vigilancia constante sobre los niños y evitar que se acerquen solos a ríos, lagos o piscinas.
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Un hecho similar se registró el 7 de diciembre de 2024, cuando organismos de socorro hallaron el cuerpo de una niña de 10 años, quien falleció ahogada en el municipio de Zaragoza. Según los primeros informes, la menor había sido reportada como desaparecida, luego de que la niña fue arrastrada por la corriente en la vereda El Aguacate. Tras la denuncia de su desaparición, los organismos de socorro activaron un operativo de búsqueda y lograron localizar el cadáver en el río Nechí.