Superservicios ordena toma de posesión de la empresa de acueducto de Santa Marta

En las inmediaciones de Essmar se presentaron disturbios en contra de la posesión por parte de Superservicios.

Foto: Essmar

La Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios (Superservicios) tomó posesión de la Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta (Essmar) este lunes 22 de noviembre. Superservicios llegó a la oficina de Essmar, removió a la gerente, Patricia Caicedo, y nombró a Yahaira Diaz como agente especial. Díaz fue asignada para tratar de sacar a la empresa de la crisis.

La posesión se ordenó al determinar que la Essmar, encargada de los servicios de acueducto y alcantarillado, no tiene las capacidades requeridas para garantizar la calidad, cobertura y continuidad en Santa Marta.

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En agosto de este año, Superservicios indicó que el agua que reciben los hogares en la ciudad no es apta para el consumo humano y podría generar un riesgo para la salud. Esto lo concluyó el organismo después de dos años de seguimiento, desde que la Essmar inició sus operaciones en 2019. Natasha Avendaño García, superintendente de la ciudad, indicó en ese entonces que el hallazgo sobre la calidad del agua era “preocupante” y señaló que la empresa estaba en una situación que requería “acciones inmediatas”.

Este lunes 22 de noviembre, Avendaño fue quien llevó a cabo la posesión de la empresa del acueducto, manifestando que: “Tomamos la decisión de intervenir a la Essmar porque presenta una crítica situación que genera graves perjuicios a sus usuarios y pone en riesgo su sostenibilidad”. Indicó que la calidad del agua y deudas pendientes de la Essmar con la Dian y la Gobernación del Magdalena fueron algunos de los factores decisivos para tomar esta decisión.

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Patricia Caicedo, exgerente de Essmar, denunció en una rueda de prensa que la intervención de Superservicios hace parte de una política del Gobierno nacional contra la administración del Magdalena. Caicedo manifestó que Essmar tiene viabilidad financiera, está mostrando resultados y que “no hay un solo punto de la ciudad donde nosotros no estemos yendo a trabajar”. Virna Johnson, alcaldesa de Santa Marta, también criticó la intervención, indicando que el Gobierno “no hace, ni dejan hacer”.