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Aquí no interesa si se llama Pedro, Valentina o Julián. Tampoco importa tanto si se trata de un pueblo de Cundinamarca, La Guajira o Antioquia. Ser niño o niña ya es suficiente para que Fundación Éxito mire con atención a esas personas cuyos años de vida se cuentan en los dedos de una sola mano.
Si se trata de alguien que nació entre la escasez y vive en un lugar donde no se sabe cómo llegará el próximo plato de comida a la mesa, esto ya es motivo suficiente para ser mirado, incluido. Hace 40 años nació la Fundación Éxito, que hace parte de Grupo Éxito y su causa principal es terminar con la desnutrición en Colombia. El pasado lunes, 6 de marzo, en Envigado, Antioquia, presentó un balance de gestión que es también un mapa del hambre en el país y en los lugares ausentes de alimento; un mapa que quiere completar más, cada año.
En una conversación fluida y guiada por Paula Escobar, su directora, y en la que participó Gonzalo Restrepo, presidente de la junta directiva de esta fundación, se entendió el avance de esta causa. “Desde hace varios años escogimos este tema; quisimos que fuera un asunto de salud pública, y política nacional económica y de desarrollo, en el país. Encontramos que la desnutrición es uno de los problemas más grandes. El desarrollo de una nación depende de los saberes de una comunidad y sus talentos. La vida es enfrentarse a problemas y resolverlos. Y para esto es fundamental tener bien la cabeza”, afirmó Gonzalo Restrepo.
Esto último sólo es posible con una buena alimentación. Y es que de acuerdo con evidencia compartida por Paula Escobar, y apoyada por estudios científicos, en los primeros mil días de vida de los niños y niñas ocurre el 85 % del desarrollo del cerebro, centro vital. A este dato se suma una declaración de Sandra Restrepo, coordinadora de investigación y alimentación de la Universidad de Antioquia e integrante de la junta directiva de esta fundación. Según ella, todas las defensas del cuerpo están en el intestino y cuando un niño se gesta en medio de la carencia, no podrá tener unas buenas. También recordó un dato contundente: la desnutrición afecta hasta a tres generaciones.
De acuerdo con el Índice de Desnutrición Crónica de esta fundación, 1’026.491 niños y niñas, menores de cinco años están en riesgo de desnutrición en Colombia. Este índice es una herramienta que se construyó con información disponible de fuentes oficiales del período entre 2015 y 2020 y contiene el análisis de 14 variables determinantes de la desnutrición crónica, en 1.121 municipios y corregimientos de Colombia.
Resultados y el camino a seguir
En medio de la inflación de los alimentos en el 2022, y los desafíos naturales que ofrece nuestra geografía, la Fundación Éxito logró ayudar a 60.046 niños y niñas, en 32 departamentos, y 193 municipios de Colombia. Esto se logró a través de los almacenes Éxito que hay en las regiones, y sirven como puntos de enlace entre los niños necesitados y el alimento.
Al resto de lugares donde no hay almacenes se llega a través de rutas especializadas y un trabajo conjunto de logística. Esos 60.046 beneficiados no son simplemente niños y niñas que reciben una donación; hacen parte de un seguimiento a través del año que incluye mediciones, y que confirman su salud. Además de paquetes que incluyen proteína (elemento vital para un buen desarrollo cerebro) hicieron parte de actividades musicales, artísticas y literarias y que se consideran “alimento para el alma”. En total se entregaron 200.403 paquetes de alimentos proteicos y se realizó una inversión social de 21.375 millones de pesos; 1,9 % más que en el 2021.
Estos beneficios pudieron llevarse gracias al Grupo Éxito, que aportó el 45 % de los ingresos (16.078 millones) a través de donación de reciclaje, actividades comerciales, entre otros. Un 27 % de los ingresos (9,778 millones) llegaron gracias a los clientes, personas que aportaron sus “vueltos” o compraron “Goticas”, una forma simple de donar, en los almacenes. Aunque otro 20 % provino de recursos propios y otras operaciones, Paula Escobar, directora de esta fundación, es consciente de la importancia del trabajo entre todos. Por esta razón trabaja con su equipo junto a más de 200 organizaciones sociales para llegar a otros puntos del problema y lograr incidir también en las políticas públicas y en las decisiones de líderes y responsables. También realizaron una movilización social en Twitter llamada “Lactatón” y un Congreso Internacional sobre lactancia.
Paula Escobar piensa en el poder que tiene cada persona, en sus manos, y en su voluntad. Esto lo comprueba a través de los testimonios de mamás y papás que viven o entienden qué es la desnutrición o cuando revisa de nuevo, las evidencias científicas que hablan de los beneficios de la leche materna. “Creemos que todas las personas nos pueden acompañar a solucionar este problema tan grave”. Una forma sencilla es a través de las “Goticas”, una forma de donación que cuenta con una auditoría y revisión seria. Se necesita una villa, una aldea entera, para criar bien un niño y una niña, dice un proverbio africano.