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El primero de estos diálogos, que será transmitido a través de El Espectador y Colombia 2020, contará con un panel donde estarán el abogado y directivo de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco; la gobernadora indígena de Toribío, Ana María Ramos; la directora del diario La Opinión de Cúcuta, Estefanía Colmenares; el procurador general, Fernando Carrillo; el consejero presidencial para la Seguridad Nacional, Rafael Guarín; el periodista y escritor Ricardo Silva Romero, y la comisionada Marta Ruiz, quien moderará el conversatorio.
La comisionada Patricia Tobón explicó que estos conversatorios estarán enfocados en la situación territorial del Cauca, Catatumbo, Bajo Cauca antioqueño y Bajo Atrato.
¿Qué traerá esta segunda fase de los Diálogos para la No Repetición del Conflicto que comenzarán mañana y finalizarán en noviembre?
En Colombia hay 23 corredores del conflicto armado donde esta situación de violencia persiste aún después del Acuerdo de Paz. De estos elegimos cuatro territorios que son el departamento del Cauca, Catatumbo, Bajo Cauca antioqueño y el Bajo Atrato chocoano, en los que se llevarán a cabo estas conversaciones que tienen como fin generar diálogos para profundizar en los factores de persistencia del conflicto para generar insumos que puedan servir para convocar acciones al Estado y a los ciudadanos sobre estas problemáticas.
¿Cómo y por qué eligen esos cuatro territorios sobre los que se dialogará?
Tuvieron mucha incidencia las voluntades que existen en el interior de los territorios para dialogar sobre estos temas, no solo me refiero a los líderes, sino también a las instituciones y personas que pertenecieron a grupos armados y que conocen las dinámicas económicas y de la guerra en estas zonas. Y claramente estos cuatro tienen la característica de que son territorios donde persiste la guerra.
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¿Sobre qué otros temas, además de la persistencia del conflicto, se hablará?
Se pretende dialogar sobre la situación del Eln en esas zonas, por ejemplo, sobre las Autodefensas Gaitanistas de Colombia y su presencia en estos sitios, el tema del narcotráfico, la militarización y entender cómo la presencia integral del Estado debe ser transversal a estas problemáticas para que se garantice una no persistencia del conflicto.
El año pasado la temática de los diálogos fue sobre líderes sociales, ¿qué balance hacen de esos seis eventos?
La conclusión general que salió de esos diálogos es que hay comunidades que no solamente están entre el fuego cruzado, sino que, al hacer las denuncias sobre lo que ocurre en los territorios, están siendo asesinados. Ese control de los grupos armados ilegales por las economías del narcotráfico ha hecho que muchos líderes y lideresas se hayan visto en peligro. Entonces, el problema no es en sí mismo tener una chaqueta antibalas o un esquema de seguridad, el problema es más de fondo, y es cómo el Estado no ejerce efectivamente una presencia integral y no una autoridad.
Además de dialogar, que es la esencia de estos eventos, ¿para qué más les sirven a ustedes en el marco de su mandato?
Colombia es un país donde se han hecho muchas recomendaciones sobre diferentes procesos de paz, y parte de la labor de la Comisión es generar recomendaciones para la no continuación del conflicto armado, pero en este caso lo importante es que sean los pobladores quienes tengan la posibilidad de ser escuchados. Es necesario que el país pueda escuchar eso desde las voces de ellos y sus explicaciones. Los procesos de paz en Colombia se han construido desde la centralidad y poco se han oído a quienes lo viven, desde la ruralidad.
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¿Qué puede ganar una persona que no ha vivido el conflicto al conectarse con ustedes en estos diálogos?
Tenemos dinámicas regionales que en el centro, en la capital y en las mismas grandes ciudades no se conocen. Y muchas veces en el análisis de esos conflictos que uno hace desde las ciudades hay muchas cargas ideológicas, entonces creo que poder escuchar a las comunidades directamente nos permitirá tener una comprensión más profunda de la realidad del país.
¿Cómo trabajan desde la virtualidad?
El COVID-19 ha afectado mucho todo el despliegue de nosotros, porque al igual que el resto de instituciones, tenemos muchas restricciones de movilidad y la mayor parte de nuestro trabajo es en terreno. Aunque hemos escuchado 16 mil testimonios sobre la guerra, gran parte de nuestro trabajo está suspendido. Así que para este año decidimos hacer alianzas con medios para darle más eco a lo que hacemos.
Y la continuación del conflicto también ha afectado...
Sí, la continuación del conflicto armado en algunos territorios ha hecho muy difícil en estos momentos el despliegue territorial, por eso estos espacios son tan importantes, porque como Comisión tenemos el deber de darle a conocer al país en un informe final lo que sucedió en el conflicto armado.
Vea la transmisión del primer evento, aquí: https://www.youtube.com/watch?v=suSxYbgCM6E