Beneficios y retos de la IA aplicadas a la arquitectura, el diseño y el urbanismo
Expertos destacan las diferentes oportunidades y desafíos que representan las nuevas tecnologías para los profesionales y los procesos en cada uno de estos campos del conocimiento.
Expertos destacan las diferentes oportunidades y desafíos que representan las nuevas tecnologías para los profesionales y los procesos en cada uno de estos campos del conocimiento.
La inteligencia artificial (IA) ha llegado para revolucionar numerosos aspectos de nuestra vida cotidiana, y uno de los campos que se ha visto permeado de esta tecnología es la educación. Es en este contexto que la IA emerge como un aliado fundamental, transformando la forma en que se enseña, se aprende y se gestiona el conocimiento en los centros educativos.
“La inteligencia artificial es una tecnología de aprendizaje continuo y permanente evolución que requiere un operador humano quien carga una información desde diversos formatos y fuentes orientada a unos propósitos específicos que se quieran lograr. Es una extensión de la inteligencia humana y no una sustitución”, advierte Oscar Fonseca Roa, director del programa de Arquitectura de la Universidad de La Salle. Teniendo como punto de partida este enfoque de la IA como herramienta de apoyo en la construcción del conocimiento, exploraremos los beneficios o posibles aplicaciones, así como los retos y desafíos que genera esta tecnología en la arquitectura, el diseño y el urbanismo.
Para Fonseca, son cinco campos de la arquitectura en los que incide la IA, el primero de ellos es el diseño arquitectónico, que puede ser asistido por esta tecnología y permite generar unas nuevas formas de desarrollar edificaciones con las condiciones paramétricas óptimas. El segundo se refiere a la posibilidad de planificar y automatizar parte del proceso de construcción a través de la parametrización y automatización de forma más eficiente, económica y segura. Como tercer aspecto, Fonseca resalta la gestión inteligente de las edificaciones desde la óptica de producción y el mantenimiento de las edificaciones generando ese disfrute y una mejor experiencia del usuario. El cuarto elemento se relaciona con la personalización de los diseños mediante la incorporación de esos deseos y sueños de los usuarios. Por último, el quinto campo está muy relacionado con la automatización y la calidad en las edificaciones que cubre otra serie de dimensiones como la simulación de las construcciones, el diseño y el confort.
En cuanto a los desafíos en su área, el director destaca la formación de arquitectos que sean capaces de “reconocer y hacer un uso humano, social, eficiente, responsable de la IA y que tengan una orientación a las finalidades y a las bondades que tiene esta tecnología”. También, hace referencia a la brecha tecnológica que existe en nuestro país por nuestro contexto ya que “muchas de nuestras regiones presentan altos niveles de desigualdad social, esto lleva a que se profundice aún más la falta de acceso a nuevos avances tecnológicos debido a las condiciones de segregación”. Adicionalmente, Fonseca considera que otro reto para tener en cuenta es la regulación para la aplicación de la IA que permita establecer aplicaciones y limitaciones en su uso.
Francisco Buitrago Cruz, director de los programas de Diseño Visual y Diseño Industrial de Unisalle, destaca que una de las ventajas más grandes de la IA en este campo es la optimización de procesos en comunicación visual, en diseño digital y en diseño industrial. También, asegura que el objetivo principal del diseño es poner en comunicación al ser humano, sus valores y necesidades con la tecnología, por esta razón se debe entender como un punto de conexión mas no como una amenaza.
El desafío principal que el director plantea se encuentra en el rol del profesional en diseño y la necesidad de entender su desarrollo desde el proceso de ‘design thinking’ como modalidad de trabajo y “entender que no somos diseñadores cosméticos, somos diseñadores centrados en el usuario que lo que buscamos es aportar a la humanidad y que nuestro rol es buscar como usamos estas herramientas para potenciar nuestro resultado”.
En materia de urbanismo, entendido desde La Salle como un campo de conocimiento relacionado con la planificación y el ordenamiento del territorio, tanto urbano como rural, la IA puede aprovecharse para fortalecer los análisis y facilitar la toma de decisiones más efectivas en menor tiempo, así como para “realizar simulaciones que permitan prever aquello que podría suceder frente a una intervención de alto impacto a nivel urbanístico”, afirma Carlos Fernando Agudelo, director de la Maestría en Planificación y Gestión del Territorio y del programa de Urbanismo.
Tecnologías como la IA permitirán avanzar hacia un urbanismo más responsivo y adaptativo frente a las condiciones particulares de los territorios. “Creo que la inteligencia artificial nos facilitará generar, en tiempo real, un monitoreo de variables cada vez más amplias y diversas que sirva para adaptar a las ciudades y los territorios rurales a los constantes cambios ambientales, sociales, culturales y económicos de nuestros tiempos”, destaca Agudelo.
Dentro de los retos más importantes que destaca el director está la generación de datos fiables que faciliten la comprensión de las problemáticas presentes en los contextos territoriales, con el fin de que alimente a la inteligencia artificial en pro de la generación de insumos más útiles para el ejercicio de la planificación territorial.
Unisalle desde la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo le apuesta a la integración de estas nuevas tecnologías mediante la implementación de herramientas tecnológicas en el aula de clase. Conoce aquí su oferta académica.
Expertos destacan las diferentes oportunidades y desafíos que representan las nuevas tecnologías para los profesionales y los procesos en cada uno de estos campos del conocimiento.
La inteligencia artificial (IA) ha llegado para revolucionar numerosos aspectos de nuestra vida cotidiana, y uno de los campos que se ha visto permeado de esta tecnología es la educación. Es en este contexto que la IA emerge como un aliado fundamental, transformando la forma en que se enseña, se aprende y se gestiona el conocimiento en los centros educativos.
“La inteligencia artificial es una tecnología de aprendizaje continuo y permanente evolución que requiere un operador humano quien carga una información desde diversos formatos y fuentes orientada a unos propósitos específicos que se quieran lograr. Es una extensión de la inteligencia humana y no una sustitución”, advierte Oscar Fonseca Roa, director del programa de Arquitectura de la Universidad de La Salle. Teniendo como punto de partida este enfoque de la IA como herramienta de apoyo en la construcción del conocimiento, exploraremos los beneficios o posibles aplicaciones, así como los retos y desafíos que genera esta tecnología en la arquitectura, el diseño y el urbanismo.
Para Fonseca, son cinco campos de la arquitectura en los que incide la IA, el primero de ellos es el diseño arquitectónico, que puede ser asistido por esta tecnología y permite generar unas nuevas formas de desarrollar edificaciones con las condiciones paramétricas óptimas. El segundo se refiere a la posibilidad de planificar y automatizar parte del proceso de construcción a través de la parametrización y automatización de forma más eficiente, económica y segura. Como tercer aspecto, Fonseca resalta la gestión inteligente de las edificaciones desde la óptica de producción y el mantenimiento de las edificaciones generando ese disfrute y una mejor experiencia del usuario. El cuarto elemento se relaciona con la personalización de los diseños mediante la incorporación de esos deseos y sueños de los usuarios. Por último, el quinto campo está muy relacionado con la automatización y la calidad en las edificaciones que cubre otra serie de dimensiones como la simulación de las construcciones, el diseño y el confort.
En cuanto a los desafíos en su área, el director destaca la formación de arquitectos que sean capaces de “reconocer y hacer un uso humano, social, eficiente, responsable de la IA y que tengan una orientación a las finalidades y a las bondades que tiene esta tecnología”. También, hace referencia a la brecha tecnológica que existe en nuestro país por nuestro contexto ya que “muchas de nuestras regiones presentan altos niveles de desigualdad social, esto lleva a que se profundice aún más la falta de acceso a nuevos avances tecnológicos debido a las condiciones de segregación”. Adicionalmente, Fonseca considera que otro reto para tener en cuenta es la regulación para la aplicación de la IA que permita establecer aplicaciones y limitaciones en su uso.
Francisco Buitrago Cruz, director de los programas de Diseño Visual y Diseño Industrial de Unisalle, destaca que una de las ventajas más grandes de la IA en este campo es la optimización de procesos en comunicación visual, en diseño digital y en diseño industrial. También, asegura que el objetivo principal del diseño es poner en comunicación al ser humano, sus valores y necesidades con la tecnología, por esta razón se debe entender como un punto de conexión mas no como una amenaza.
El desafío principal que el director plantea se encuentra en el rol del profesional en diseño y la necesidad de entender su desarrollo desde el proceso de ‘design thinking’ como modalidad de trabajo y “entender que no somos diseñadores cosméticos, somos diseñadores centrados en el usuario que lo que buscamos es aportar a la humanidad y que nuestro rol es buscar como usamos estas herramientas para potenciar nuestro resultado”.
En materia de urbanismo, entendido desde La Salle como un campo de conocimiento relacionado con la planificación y el ordenamiento del territorio, tanto urbano como rural, la IA puede aprovecharse para fortalecer los análisis y facilitar la toma de decisiones más efectivas en menor tiempo, así como para “realizar simulaciones que permitan prever aquello que podría suceder frente a una intervención de alto impacto a nivel urbanístico”, afirma Carlos Fernando Agudelo, director de la Maestría en Planificación y Gestión del Territorio y del programa de Urbanismo.
Tecnologías como la IA permitirán avanzar hacia un urbanismo más responsivo y adaptativo frente a las condiciones particulares de los territorios. “Creo que la inteligencia artificial nos facilitará generar, en tiempo real, un monitoreo de variables cada vez más amplias y diversas que sirva para adaptar a las ciudades y los territorios rurales a los constantes cambios ambientales, sociales, culturales y económicos de nuestros tiempos”, destaca Agudelo.
Dentro de los retos más importantes que destaca el director está la generación de datos fiables que faciliten la comprensión de las problemáticas presentes en los contextos territoriales, con el fin de que alimente a la inteligencia artificial en pro de la generación de insumos más útiles para el ejercicio de la planificación territorial.
Unisalle desde la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo le apuesta a la integración de estas nuevas tecnologías mediante la implementación de herramientas tecnológicas en el aula de clase. Conoce aquí su oferta académica.