El rápido crecimiento de la población mundial, asociado al agotamiento de los recursos y el cambio climático, los altos índices de desigualdad en especial en el acceso a la tecnología de ciertas poblaciones, el mal uso de los datos y la información, los modelos económicos de globalización, los conflictos locales, regionales y mundiales, así como el incremento de la corrupción y la ineficacia en la gobernanza; revelan grandes desafíos en el desarrollo de las ciudades sin importar las características de sus habitantes y los recursos con los que cuenten para su desarrollo.
Frente a estos retos, el manejo de los datos y la información en la generación de políticas públicas resultan de gran relevancia para que los tomadores de decisiones logren beneficiar de manera acertada a los ciudadanos con las acciones implementadas. Es en este campo, que la inteligencia artificial (IA) apoya la implementación de soluciones tecnológicas e innovadoras que aporten a la habitabilidad, sostenibilidad de las ciudades, así como generar una mejor calidad de vida de los ciudadanos.