Para conmemorar el día mundial del bacteriólogo, la presidente del Colegio Nacional de Bacteriología, Marlene Vélez De La Vega, habló con El Espectador sobre la importancia de esta profesión en un país como Colombia y la lucha gremial para destacar su labor.
En el marco del día del bacteriólogo, que se celebra este miércoles 28 de abril, la presidente del Colegio Nacional de Bacteriología, Marlene Vélez De La Vega, resalta la importancia de esta profesión en el país, no solo en medio de la emergencia sanitaria del Covid-19, sino para el diagnóstico, prevención y tratamiento de diferentes patologías del cuerpo humano.
Para ello, explica como punto de partida qué es la bacteriología hasta llegar al fondo de las condiciones laborales de estos profesionales en Colombia y la importancia de las investigaciones realizadas en los laboratorios.
¿Qué es la bacteriología?
La Ley 841 de 2003 establece en su artículo 1, que la Bacteriología es una profesión de nivel superior universitario con formación social, humanística, científica e investigativa cuyo campo de acción se desarrolla fundamentalmente en las áreas de promoción de la salud, prevención, diagnóstico, pronóstico y seguimiento de la enfermedad, vigilancia epidemiológica y el aseguramiento de la calidad, el desarrollo biotecnológico, la investigación básica y aplicada, la administración y docencia relacionadas con la carrera, la dirección científica y la coordinación del laboratorio y los bancos de sangre
¿Por qué se celebra el día del bacteriólogo?
La Ley 1193 de 2008 en su artículo 42 establece que el 28 de abril de cada año se celebre el Día Nacional del Bacteriólogo en reconocimiento a la labor desarrollada por el doctor Federico Lleras Acosta quien nació el 28 de abril de 1877 y dedicó su vida al estudio clínico y de laboratorio de varias enfermedades tropicales y de manera especial a la Lepra. Desde su laboratorio abierto al público en 1906, se convirtió en el soporte del desarrollo de la medicina al realizar exámenes químicos, de parasitología y bacteriología.
¿Cuál es el papel del bacteriólogo y qué aporta a la salud pública colombiana?
El Bacteriólogo durante su formación desarrolla las competencias que le permiten intervenir en la Salud Pública desde la promoción de la salud, prevención de la enfermedad, prevención del riesgo biológico, realización de estudios epidemiológicos que dan cuenta del comportamiento particular de cada enfermedad; participa en estudios de caso, determinación de tasas, prevalencias y situaciones de intervención entre otras.
El bacteriólogo tiene la formación que le permite interactuar con el equipo interdisciplinario para la formulación y atención en salud pública, epidemiológica y comunitaria en el marco operacional de la Política de Atención Integral en Salud (PAIS).
Aparentemente, se conocen muy pocos campos sobre la bacteriología, ¿cuáles son las principales técnicas y competencias que se ejercen?
Cabe anotar que la bacteriología no es una ciencia, sino una profesión en donde se estudian y practican un conjunto de disciplinas, que le dan las competencias para realizar análisis microbiológicos y bioquímicos de muestras de diferente tipo en organismos vivos.
Tradicionalmente el bacteriólogo, se ha desempeñado en el área de la salud, ha tenido un quehacer profesional orientado hacia la asistencia clínica; con los campos de acción que contempla la ley 841 y las competencias establecidas en la resolución 2772, que obedecen a las exigencias y retos del mundo globalizado, los Programas de Bacteriología innovaron sus currículos para que el bacteriólogo y sus homólogos puedan desempeñarse dentro de una dinámica inter y multidisciplinar que lo prepara para atender el cambio social, desde su saber, hacer y ser.
Cada día es más evidente la participación activa de los bacteriólogos en los laboratorios, ya sea en el diagnóstico en salud humana o animal (veterinaria), en la industria, en la higiene e inocuidad alimentaria; productos farmacéuticos, químicos, cosméticos, tratamiento de aguas; medioambiente, agricultura, biotecnología entre otros y se han convertido en eje fundamental para el manejo de la prevención de la enfermedad, la promoción de la salud, el diagnóstico de patologías.
De igual manera el Bacteriólogo puede dedicarse al aseguramiento de la calidad de los procesos y procedimientos clínicos, humanos, forenses, animales, medio ambiente, industrias y otros afines a su formación profesional.
Es también profesional competente para desempeñarse en los Bancos de Sangre y Tejidos, creación de nuevos tratamientos, evaluación de riesgos ambientales desde lo biológico, la calidad del agua, del suelo, del aire y demás.
Los avances tecnológicos actuales, exigen a este profesional, tener una formación avanzada en la comprensión y manejo de tecnologías de punta inherentes a su campo de acción, dada la importante tendencia de automatización de los procesos en el laboratorio clínico, alta especificidad de los resultados, el corto tiempo de obtención de los mismos y exactitud en los valores obtenidos.
Los principales campos de desempeño desde las tecnologías de avanzada se refieren al manejo, comprensión y fundamentación de pruebas como la Biología Molecular, los Cultivos de Tejidos, la Citometría de Flujo, pruebas de genómica, proteómica, espectrometría de masas y otras.
Cada proceso que tiene relación con los análisis de diagnóstico, de cualquier área de desempeño, exige y demanda la calidad en los procesos, y es así que el profesional de la Bacteriología domina de una forma importante la normativa relacionada e implementación de normas nacionales e internacionales relacionadas con la calidad.
De otro lado, el Bacteriólogo tiene una importante fundamentación en investigación que le permite su inclusión en proyectos de investigación, que dan respuesta a problemáticas propias de su entorno de ejecución.
La asistencia, la docencia, la investigación, la gerencia son líneas de acción para las cuales el bacteriólogo está preparado.
¿Cuál es el rol y función que cumple el Colegio de Bacteriología en Colombia?
El Colegio Nacional de Bacteriología CNB, es una entidad de carácter gremial, sin ánimo de lucro, que tiene como propósito el desarrollo integral, el fortalecimiento profesional y científico de los Bacteriólogos y homólogos, la defensa de sus derechos, en los diferentes campos de acción y competencias profesionales.
Desde su creación en 1998, ha realizado esfuerzos por lograr un nivel de reconocimiento para la profesión como parte fundamental de los equipos interdisciplinarios en salud y ha representado los intereses profesionales de sus afiliados activos. Parte de ese trabajo gremial, ha sido la gestión ante el Congreso de la República que consiguió en el 2003 la sanción presidencial para la “Ley del Bacteriólogo y Código de Bioética” (Ley 841 de 2003) y su Ley complementaria 1193 de 2008. Esta última ley la 1193 y la ley 1164 de 2007 delega las funciones públicas al Colegio Nacional de Bacteriología:
a) inscribir los profesionales de la disciplina correspondiente en el Registro Único Nacional del Talento Humano en Salud;
b) Expedir la tarjeta profesional como identificación única
c) Expedir los permisos transitorios para el personal extranjero de salud que venga al país en misiones científicas o asistenciales de carácter humanitario
Además, el CNB es el encargado de velar por el cumplimiento del Código Bioético y Deontológico de la Bacteriología en Colombia
¿Son buenas las condiciones de un bacteriólogo en Colombia? ¿Qué hay por corregir para mejorarlas?
Uno de los retos para el desarrollo de la bacteriología es la formalización laboral, porque desafortunadamente al igual que el resto del talento humano en salud están sometidos a una precarización laboral, no solo en términos de honorarios y salarios, sino también en horarios indiscriminados, modelos de contratación, tercerización, inestabilidad laboral, falta de elementos de protección adecuados, pérdida de garantías y estímulos laborales.
Hay un alto porcentaje de bacteriólogos contratados por prestación de servicios. Existe un desequilibrio entre la inversión que se requiere para prepararse óptimamente como profesional de la Bacteriología y la remuneración posterior acorde a los diferentes niveles de preparación (Especializaciones, Maestría, Doctorado, Post Doctorado).
Teniendo en cuenta que las tarifas de los análisis de laboratorio tienen una incidencia directa tanto en honorarios como en los salarios de nuestros profesionales, se necesita urgentemente que el Ministerio de Salud emita reglamentación tarifaria actualizada para garantizar calidad en los resultados e ingresos adecuados a los bacteriólogos.
¿Por qué desde el Gobierno Nacional se debe incentivar y apoyar la investigación desde la bacteriología?
En cualquiera de las áreas de desempeño del bacteriólogo llámese forense, banco de sangre y tejidos, diagnóstico clínico humano, animal o vegetal, industria, docencia, biotecnología, los datos que se generan son objeto de aplicación del método científico; es por ello que esta gran riqueza de datos puede llevar a nuevo conocimiento que es aplicable y de utilidad basada en evidencia a las directrices, guías y protocolos de Salud Pública y que el Estado Colombiano debiera hacer uso de ello y apoyar la investigación realizada por los profesionales de la bacteriología y sus homólogos.
¿Cuál ha sido el papel de los bacteriológicos en medio de la pandemia? Los aspectos que más resaltan
Las pruebas de diagnóstico para el SARS-CoV-2, tanto las de RT-PCR, pruebas rápidas, ELISA y Quimioluminiscencia son realizadas por los profesionales bacteriólogos y sus homólogos. Por ello, aunque no nos llamen profesionales de primera línea, somos fundamentales imprescindibles para el diagnóstico, seguimiento, pronóstico de la enfermedad y proyecciones de la pandemia.