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Elías Larrahondo Carabalí es el actual gobernador del Cauca, un campesino oriundo del corregimiento rural La Balsa, del municipio de Buenos Aires, y el primer gobernador afro en la historia del departamento. Desde su llegada al cargo, se ha esforzado por generar escenarios de inclusión, que permitan a su vez fomentar un desarrollo del territorio Pacífico y cada vez más digno para las comunidades que lo habitan.
Sin embargo, este camino no ha sido una tarea fácil. El Cauca tiene una historia de esclavismo que hoy sigue dejando secuelas entre su gente. Solo el hecho de que una etnia como la afro o la indígena llegue a un cargo de esta instancia resultó ser todo un desafío por afrontar. En entrevista con El Espectador, Larrahondo cuenta cómo ha sido su paso por la Gobernación y por qué su bandera es la inclusión.
“Entendimos que la población afro hace un aporte al desarrollo del país y del departamento significativo. Tenemos que romper ese mito y temor de que hay una limitación de las etnias para ejercer un cargo público. Por eso, empezamos a recorrer el departamento, municipio por municipio, y la gente fue encontrando nuestra sinceridad, nuestro conocimiento del territorio, nuestro humanismo. Y aunque no es fácil que se haga la transición y menos para la clase dirigente, nuestras acciones vienen demostrando lo lejos que podemos llegar”, aseguró.
Este fue un punto de partida para impulsar la inclusión desde el gobierno departamental, que hoy en día lo integran funcionarios de todos los rincones del Cauca, de todas las etnias y edades.
Por ejemplo, el secretario jurídico es un joven de 29 años, la jefe de la oficina de Gestión Social es un indígena páez, y las secretarías de Salud y Agricultura las lideran mujeres campesinas. Asimismo, la secretaria de Hacienda es una mujer afro de Timbiquí.
Pero el trabajo de inclusión no se queda solo en las oficinas de la Gobernación: En este camino, el gobernador ha puesto en marcha “Mujeres Panamericanas”, una iniciativa para resignificar el trabajo de las vendedoras a lo largo de la carretera internacional en el departamento. Este proyecto tiene como fin el mejoramiento de las condiciones logísticas a pequeños puntos de venta de productos agropecuarios de mujeres cabeza de familia, y hasta a la fecha ha beneficiado a 130 mujeres.
“Es un proyecto que nace con el propósito de impulsar emprendimiento del departamento, para que cada mujer pueda mejorar lo que hace. Nos encargamos de dar insumos técnicos para facilitar lo que producen y herramientas como capacitaciones en temas empresariales y en marketing para el crecimiento de sus negocios”, expresó Larrahondo.
Formalizar la economía rural, una prioridad
Históricamente, el Cauca ha sido uno de los departamentos del país más golpeados por el conflicto armado, no solo por la presencia de grupos al margen de la ley, sino por la cantidad de cultivos ilícitos que rodean el territorio. Esto ha hecho que los jóvenes busquen como primera oportunidad dedicarse a este tipo de economía.
Por esta razón, la actual Gobernación busca fortalecer y formalizar la economía rural, para dar nuevas oportunidades a los productores y que su única salida no sea la ilegalidad. En este camino, se trabaja en proyectos como el de la educación productiva, que busca darles a estudiantes los insumos y capacitaciones para empezar su empresa familiar, con el cultivo de café, aguacate, caña panelera y cacao, entre otros.
Para hacer esto posible, se parte de la implementación de una “Revolución Vial”, con la entrega de kits de maquinaria amarilla para intervenir los 42 municipios del departamento, la pavimentación de los accesos a las cabeceras, el mantenimiento y mejoramiento de las vías terciarias para llegar hasta la última vereda y garantizar que los campesinos puedan salir a vender sus productos al mercado.
Este trabajo se complementa con la entrega de maquinaria verde a los municipios, en convenio con el Fondo Paz, que ha llegado ya a 20 municipios con una inversión de $7.500 millones.
Desde hace 30 años, al departamento no llegaba maquinaria agrícola a ningún municipio. Ahora, hemos llegado a esas zonas donde está el campesinado con esta gran apuesta de fortalecimiento y formalización de la economía rural, ya que son herramientas que tecnifican la labor y facilitan muchísimo más todo ese ejercicio que hace este gran sector para llevar la comida a la mesa colombiana”, puntualizó el gobernador.
Un 2023 enfocado en la paz
Para Elías Larrahondo, la agenda del próximo año tiene como prioridad la consolidación de la paz, desde el desescalamiento del conflicto, la dejación de armas y los escenarios de diálogo, acompañado de una inversión en el departamento, para acelerar los proyectos. “Queremos que el Cauca sea atendido de manera diferencial con proyectos de impacto que brinden calidad de vida a sus habitantes y ser coequiperos de la paz total en el departamento”, concluyó el mandatario
“En salud, aplazamos prioridades, pero no las cambiamos”
El gobernador asegura que la pandemia del covid-19, el paro y la temporada invernal han sido los grandes retos para en plan de gobierno del departamento. Sin embargo, la salud siempre fue la prioridad, y por esto, se han redireccionado los recursos para dotar hospitales con implementos necesarios para atender la pandemia y garantizar la atención de mediana complejidad en el sur del Cauca y los municipios del norte de Nariño. Asimismo, fortalecer esta atención en la costa Pacífica y la infraestructura en todo el departamento.
“Terminamos varios hospitales como el de La Vega, Puerto Tejada, Villa Rica y Toribío Maya, de Popayán y hoy estamos trabajando en la dotación para que cada uno de ellos quede funcionando”.
Larrahondo afirma que se ha hecho la dotación más grande en la historia del departamento en equipos biomédicos, ambulancias, lanchas ambulancias y reforzando la telemedicina para las zonas más apartadas del territorio.