Ocho condenados por falsos positivos de Soacha

Se trata de  la primera condena proferida ayer, después de tres años de que se desatara el escándalo, que llevó a una histórica purga militar en 2008.

La jueza tercera especializada de Bucaramanga declaró culpables a ocho militares por su participación en falsos positivos, en los que las víctimas fueron jóvenes de Soacha (Cundinamarca). Ahora los procesados quedan pendientes de la sentencia, en la que se espera una pena hasta de 60 años de prisión, máxima permitida por el Código Penal.

El caso ocurrió en 2008. Las víctimas fueron Andrés Pesca Olaya y Eduardo Garzón Páez, quienes en marzo de ese año murieron a manos de militares en la vereda Brasilia, de Cimitarra (Santander). Pesca y Garzón, habitantes de Soacha, fueron reportados por el Ejército como muertos en combate en Cimitarra, como presuntos secuestradores que iban a plagiar a un ganadero de la región.

En la lectura del fallo, el Juzgado señaló que en la ‘Misión Táctica Marfil’, como fue llamada la operación en la que murieron Pesca y Garzón, los uniformados ejecutaron actos atroces que no tenían relación alguna con su servicio.

Los condenados son el teniente coronel Wilson Javier Castro Muñoz, comandante del Batallón Rafael Reyes; el teniente Villani Realpe, el sargento José Eduardo Ñiámpira Benavides y los soldados Guillermo Pacheco Anzola, Juan Carlos Álvarez, Nelson Ospina Tavarel, Venancio Puente Guapacha y Germán Augusto Oliveros.

Todos pagarán por homicidio en persona protegida y desaparición forzada. Los dos oficiales y el suboficial, además, por falsedad ideológica en documento público y peculado por apropiación, por haber reportado ante sus superiores como legal un falso positivo.

Otras 15 madres  esperan justicia

Para las madres de Soacha, que desde 2008 han liderado una batalla jurídica para que las ejecuciones extrajudiciales de sus hijos, presuntamente a mano de militares, no queden impunes, los procesos se resumen en la palabra dilación. En la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía, donde los 17 casos de falsos positivos de Soacha —tres de ellos en Bogotá— confirman que la mayoría de casos siguen en etapa preparatoria. Por eso la reciente condena a ocho militares por la muerte de dos jóvenes de Soacha, Andrés Pesca Olaya y Eduardo Garzón Páez, presentados por el Ejército como muertos en combate, es esperanzadora.

Ahora, otras 15 madres de Soacha esperan que se haga justicia . Asimismo, el expersonero de Soacha Fernando Escobar, exaltó el fallo de primera instancia y le recordó al Consejo Superior de la Judicatura vigilar a los jueces y abogados que llevan los demás procesos, “de manera que se garantice la lealtad de las partes”.