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La Unión Europea acordó el jueves un plan de rescate económico para enfrentar el impacto de la pandemia del coronavirus, que deja más de 90.000 muertos en el mundo y amenaza con hundir al planeta en un desastre económico sin precedentes.
En una intensa jornada de varias reuniones de líderes mundiales sobre la pandemia, los ministros de Finanzas europeos acordaron en videoconferencia un plan de ayudas por 500.000 millones de euros (US$550.000 millones).
"Europa ha tomado una decisión y está lista para enfrentar la gravedad de la crisis", tuiteó el ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, tras el encuentro, que acabó "con los aplausos de los ministros", según Mario Centeno, ministro de Finanzas portugués que preside el Eurogrupo.
Esa ayuda estará disponible "inmediatamente", sin condiciones, explicó Le Maire. Sin embargo, los 27 descartaron una vez más la idea de una emisión de deuda común como pedían España e Italia, y a lo que se oponían los países del norte, especialmente Holanda y Alemania. Esa diferencia había hecho fracasar una primera reunión.
Y es que la pandemia provocará "la peor caída económica desde la Gran Depresión" de 1929, alertó más temprano la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.
Por primera vez desde el inicio de la pandemia, el Consejo de Seguridad de la ONU se reúne también este jueves para intentar olvidar sus desacuerdos, especialmente entre Estados Unidos y China, en un encuentro por videoconferencia a puerta cerrada dedicado a la COVID-19.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, subrayó que es "el momento de la unidad", y no de las críticas, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, reprochara la gestión de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Asimismo, los principales países productores de petróleo, encabezados por los miembros de la OPEP, se reunieron por videoconferencia para intentar acordar un recorte de producción que ponga fin al desplome de precios debido a la pandemia y la reducción brutal de la demanda. El precio cayó un 9% en Nueva York este jueves.
Según el ministro kuwaití de Petróleo, Jaled al Fadhel, se busca "restablecer el equilibrio del mercado e impedir nuevas caídas de los precios", y por ello se plantean reducir la producción en entre 10 y 15 millones de barriles diarios.
Una "pesadilla"
La pandemia no da tregua. Del millón y medio de contagiados en el mundo, más de 90.000 han muerto, la mitad en Italia, España y Estados Unidos, según un recuento de la AFP establecido la tarde del jueves basándose en fuentes oficiales.
Estados Unidos (más de 16.000 muertos y 430.000 casos) es el país con más infecciones y donde la enfermedad avanza más rápidamente.
En Nueva York, epicentro del brote estadounidense, se registró un nuevo récord de 799 muertes en 24 horas, pero sólo hubo 200 nuevos pacientes ingresados a hositales, "el menor número que hemos tenido desde que empezó esta pesadilla", dijo el gobernador Andrew Cuomo.
El desempleo en Estados Unidos sin embargo no cesaba de alcanzar niveles históricos: unos 6,6 millones de personas más pidieron subsidios de desempleo, según cifras publicadas este jueves.
En Europa, Italia, con más de 140.000 casos y 18.279 muertos, encabeza la lista trágica. Entre los fallecidos figuran un centenar de médicos. Una noticia positiva entre tantas cifras nefastas: un bebé de dos meses, probablemente el paciente más joven de COVID-19 en Italia, fue dado de alta este jueves de un hospital de la ciudad de Bari.
En España, el balance diario se redujo este jueves tras dos días consecutivos al alza, con 683 fallecidos en 24 horas. Pero el número total de decesos superó la cifra simbólica de los 15.000.
"El incendio que desató la pandemia comienza a estar bajo control", dijo el jefe de gobierno socialista, Pedro Sánchez, en una sesión en el Congreso para ratificar la prórroga hasta el 25 de abril del confinamiento iniciado a mediados de marzo.
En el Reino Unido reportó este jueves 881 nuevas muertes para un total de 7.978, mientras el primer ministro, Boris Johnson, que lleva cuatro días hospitalizado por la COVID-19, salió de la unidad de cuidados intensivos.
El Reino Unido estudia prolongar el confinamiento, mientras que la canciller Ángela Merkel pidió a los alemanes "paciencia". Francia, que supera ya los 12.000 fallecidos, también prevé ampliar más allá del 15 de abril el confinamiento, como ya lo hicieron Sudáfrica, Hungría y otros países.
Semana Santa inédita
A partir de este jueves, millones de cristianos confinados en los cinco continentes van a celebrar la Pascua en unas circunstancias inéditas.
Sin fieles, excepto un reducido número de asistentes, el papa Francisco celebró en el Vaticano la misa del Jueves Santo, que recuerda la Última Cena de Jesús, uno de los momentos más importantes del año litúrgico.
"En estos días más de sesenta curas han muerto en Italia mientras se ocupaban de enfermos en los hospitales", dijo, al homenajearlos en la homilía.
Debido al coronavirus, el pontífice argentino no pudo efectuar el ritual del lavatorio de los pies.
Las autoridades de los países más fervorosos han insistido en que durante estas fiestas, en las que tradicionalmente se reúnen las familias, se respeten más que nunca las consignas de confinamiento.
En España y en varios países de América Latina, las procesiones y misas se siguen por internet en las redes sociales para que los creyentes puedan revivir la Pasión de Jesús.
El impacto regional
En América Latina y el Caribe, se han registrado 1.814 muertes y unos 45.000 casos. Tan solo en Colombia se han registrado 69 muertes y 2.223 casos confirmados.
Brasil, el país latinoamericano más golpeado, con 800 muertos y 15.927 contagios, prepara un megaoperativo de hasta 40 vuelos para transportar desde China un cargamento de 240 millones de mascarillas.
En Ecuador, el segundo más afectado de la región, el gobierno amenazó con cárcel a quienes violen la cuarentena. En la ciudad ecuatoriana de Guayaquil, la ciudad latinoamericana más golpeada por la COVID-19, quedó varado un vuelo que repatriaba a 300 europeos rumbo a París por un problema técnico.
La oenegé Oxfam advirtió que 500 millones de personas en todo el mundo podrían caer en la pobreza por la pandemia si no se adoptan planes de ayuda.
En Italia, la mafia está distribuyendo comida y prestando dinero sin intereses para los más necesitados, al mismo tiempo que planea apoderarse de los pequeños comercios en dificultades, según el autor y especialista en la materia Roberto Saviano.