¿Es malo practicar brujería? Mitos sobre la magia

Nos han enseñado que la brujería es mala, un pecado. Pero solo nos han contado una parte errada de la historia, basada en mitos. En esta nota vamos a exponer el punto de vista que se conoce por las personas que practican la brujería como una conexión entre la naturaleza, lo espiritual y nosotros como seres humanos. Para esto vamos a tomar como referente el texto de Gabriela Herstik, autora del libro Cómo ser una bruja moderna.

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¿Qué significa hacer brujería?

La brujería es una conexión profunda con la naturaleza y todos los seres vivos, transmite una energía que puede ser llamada como magia que, una vez una persona puede adquirirla y manejarla, adquiere cierto poder que va conectado con sus dones que son manejados por la misma naturaleza.

Herstik lo expone en su texto: “La brujería es un camino por la naturaleza, una ciencia que venera la Tierra, porque la considera una manera de honrar, aprender y explorar todos los seres vivos y energías que deambulan a nuestro alrededor, incluso aquellos que somos incapaces de ver con los ojos. La brujería es magia y sirve de intenciones a través de hechizos y rituales para conseguir objetivos”.

Brujería blanca y negra

Lo primero que debes saber es que no existe una brujería blanca o negra, por ende no existe una bujería mala o buena, a pesar de que hay brujas que se autodenominan de esta forma. Herstik explica que ella no usa esos términos errados, el hacer bien o mal con la magia depende netamente de cómo la bruja utilice su magia.

Así lo explica la autora: “Aunque algunas brujas se llaman a sí mismas «brujas blancas» o aseguran practicar «magia blanca» o «magia negra», lo cierto es que en este libro no encontrarás estos términos. La magia, en su esencia, es energía. Y la energía no es blanca o negra, ni nociva o inofensiva; eso dependerá de cada bruja y de lo que esta decida hacer con su energía. Etiquetar lo que parece positivo como «magia blanca» y lo que parece negativo como «magia negra» es un grave error. El blanco atrae la energía, tanto la buena como la mala. El negro, en cambio, la repele, tanto la buena como la mala”.

¿La brujería es mala?

Herstik aclara que si es un hecho que la magia puede ser usada con malas intenciones. Piensalo en comparación con otras creencias, por ejemplo, Dios le da dones a las personas, pero de ellas depende si la van a usar para el bien o el mal, con la brujería se trata de lo mismo. Cada persona con magia decide. Y algo clave a resaltar es que ellas también consideran que lo malo trae consecuencias como el karma.

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Brujería y el karma

El karma es un principio espiritual que se basa en la ley de causa y efecto, similar a la tercera ley de Newton, donde a cada acción le corresponde una reacción. En términos espirituales, implica que cada acción que realizamos genera una energía que regresa a nosotros. Esto no pasa solo con nuestras acciones físicas, sino también a los pensamientos y emociones que emitimos en el universo. La brujería considera el karma como una fuerza justa y neutral que, aunque puede tardar en manifestarse, finalmente actúa sobre las personas de acuerdo con sus acciones.

Dentro de la práctica de la brujería, el karma se interpreta como un reflejo de lo que somos y hacemos en la vida y se asocia con diferentes niveles: el karma personal (de nuestras propias acciones), el karma generacional (vinculado a la familia), y el karma cultural (relacionado con la región o sociedad).

En esta perspectiva, las brujas buscan comprender el karma para armonizar sus acciones y energía con el universo, asegurando que lo que proyectan en el mundo regrese de una forma constructiva. La ética de “no hacer daño” en brujería también se ve influenciada por el karma, dado que cualquier energía negativa enviada, como en hechizos de manipulación, podría retornar multiplicada, afectando directamente a la persona que actuó con malas intenciones.

Por último, queremos recalcar que esta es una creencia del sentido de vida de muchas personas, por lo tanto, es necesario precisar que no es superior o inferior a otras perspectivas. Tan solo hace parte de una multiculturalidad en la que todos estamos sumergidos. Si lo deseas puedes ampliar esta información, te invitamos a leer el libro que hemos citado.