Aplicar aceite de argán sobre el cabello ayuda a mantenerlo hidratado. También puedes poner unas gotas en el champú habitual en el momento del lavado del cabello.
El aceite de argán se ha vuelto muy popular en los últimos años aunque es un tesoro descubierto relativamente hace poco. Se extrae de los frutos del árbol de argán, originario de Marruecos, una vez secos. No solo tiene un alto porcentaje de ácidos grasos esenciales, grasos Omega-3 y vitamina E sino un alto poder antioxidante, de ahí que sea considerado el nuevo elixir de la belleza.
Dada sus características cosméticas, el aceite de argán se encuentra en multitud de productos cosméticos para el cuidado de la piel y del cabello pero debes asegurarte al momento de la compra que dentro de los ingredientes del producto aparezcan las palabras Argania Spinosa Oil, que es el aceite en su máxima pureza. Su color tiene que ser dorado y el olor, sin perfume añadido es casi imperceptible.
Sigue a Cromos en WhatsAppEstá indicado para todos los tipos de piel, incluso grasas o acnéicas, ya que es no comedogénico (que tiene una propensión a obstruir los poros y potencialmente conducir al acné).
Antiarrugas y otros beneficios del aceite de argán
Hidrata y nutre la piel
Se puede aplicar directamente en la piel y aplicar mediante un suave masaje. También se puede mezclar con la crema hidratante facial o corporal de uso habitual para aportarle un extra de hidratación a la piel de forma natural.
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Efecto antiarrugas
Su alto contenido en antioxidantes hace del aceite de argán un potente antiarrugas, ya que protege al organismo de los efectos nocivos de los radicales libres. Se recomienda aplicarlo antes de ir a dormir, sobre la piel limpia, y dejarlo actuar durante toda la noche.
Calma la piel
El aceite de argán tiene un poderoso efecto calmante. Es perfecto para tratar la piel irritada después de tomar el sol y reducir todo tipo de inflamaciones.
Suaviza la piel
Gracias a su poder suavizante, ayuda a reducir las rugosidades de las zonas más ásperas de la piel, como codos y pies. Puedes añadir unas gotas de aceite de argán a tu exfoliante favorito o simplemente mezclar con azúcar y notarás el efecto sobre la piel.
Fortalece las pestañas
Fortalece y evita la caída de las pestañas. Poner unas gotas de aceite de argán en la pestañina que uses a diario, regenerará las pestañas y ayudará a mantenerlas fuertes y sanas.
Bactericida y fungicida
Aunque se trata de un aceite, este es de origen vegetal por lo que ayuda a reducir el acné. Lo ideal es mezclar unas gotas de este aceite a nuestra crema hidratante habitual.
Contra las estrías
Gracias a su gran poder hidratante ayuda también a combatir la aparición de estrías aportando elasticidad a la piel. Está también indicado para la delicada piel del bebé y es apto durante el embarazo.
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Regenerante
Con un gran efecto regenerador, puede usarse en el tratamiento tópico de enfermedades de la piel como la psoriasis o para eliminar cicatrices.
Cuidado capilar
Aplicado sobre el cabello ayuda a mantenerlo hidratado. Puedes aplicar unas gotas en el champú habitual en el momento del lavado del cabello y a modo de mascarilla para tratar las puntas secas. Úntalas de aceite de argán y déjalo reposar durante media hora antes de lavarlo. Puedes hacerlo una vez al mes o cada quince días.
Fortalece las uñas
Gracias a su contenido en vitamina E y ácidos grasos esenciales, que fortalecen las uñas y las protegen frente a los daños, al tiempo que acondiciona y nutre las cutículas. Este aceite también ayuda al crecimiento de la uña.
Elimina la caspa
Aplícalo sobre el cuero cabelludo con un ligero masaje y dejándolo actuar durante una media hora antes de lavarlo de forma normal.
Labios agrietados
Solo es necesario aplicar una o dos gotas en los labios y sentirás el cambio. El aceite no sólo ayuda a mejorar los labios agrietados, sino también a mantenerlos suaves, flexibles y cuidados.
