
Aprende a consentir sus pies
Dra. Mónica Alexandra García Camelo, Bacterióloga-podóloga:
1. Séquese muy bien los pies. Parece exagerado, pero lo mejor es hacerlo con secador. Además, evite caminar descalzo en zonas húmedas, así previene el contagio de hongos y bacterias.
Sigue a Cromos en WhatsApp2. Solo para diabéticos. Estos pacientes tienden a perder sensibilidad en las terminaciones nerviosas, por lo que deben mantenerlos humectados para evitar resequedad y laceraciones.
3. Use zapatos cómodos. Asegúrese de que sean de horma ancha. Evite los tacones muy altos ya que deforman los huesos y producen callos y juanetes.
4. Corte bien las uñas. La manera correcta de cortar las uñas es en forma recta, cuidando de que no queden demasiado cortas. Así, evita que crezcan hacia adentro y lastimen los dedos.
5. Lávelos bien. Diariamente báñelos con jabón y agua tibia, remueva las durezas de los talones y de la planta del pie con una piedra pómez, luego séquelos y aplique un talco desodorante. Ojo, las cremas son inapropiadas porque favorecen la sudoración.
6. Cuidado con la ropa. Por más emergencia que haya, nunca repita medias. Unos calcetines sucios incrementan la proclividad a la sudoración y la resequedad.
7. Hágase un pedicure. Acostúmbrese a hacerse un pedicure profesional una vez al mes y asegúrese de que los implementos estén debidamente esterilizados.
8. No se automedique. En caso de juanetes, callosidades, hongos, verrugas y uñas encarnadas evite aplicarse fórmulas caseras que pueden generar infecciones y mayor resequedad.
9. Ojo con el sudor. Si sufre de pies sudorosos debe tener más cuidado. Lave con jabón desodorante, seque muy bien verificando que no les quede humedad interdigital; aplique talco medicado especial para el exceso de sudor.
Dra. Elena Valbuena, Podóloga:
10. Use plantillas. Si presenta problemas en la marcha o dolores plantares, no dude en usar plantillas; le ayudarán a relajar los pies y no le deformarán los zapatos.
Foto: iSotck.