Ha protagonizado portadas de medios como Elle, Vogue, Harper's Bazaar y Glamour.
Los cuerpos hegemónicos empiezan a agrietarse. No es que las figuras hiperdelgadas en la industria de la moda y la publicidad vayan a dejar de existir. Lo que sí está sucediendo es un movimiento que reivindica la naturalidad de los cuerpos. Hoy modelos de todas las tallas empiezan a afianzarse en las pasarelas, aunque a pasos lentos.
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Sigue a Cromos en WhatsAppAshley Graham es una de las embajadoras de las mujeres que se salen de los cánones tóxicos. Fue portada de reconocidas revistas de moda y su imagen en recurrente en grandes ferias de moda. Su cuenta de Instagram es una plataforma en la que comparte su activismo. A la diversidad corporal ahora suma la defensa del derecho al vello corporal en las mujeres.
No es que haya escrito una declaración. Una postal con su hijo y su esposo Justin Ervin en la que se expone sin prejuicios sus axilas. En la última imagen del carrusel se puede apreciar su posición frente a un tema que a estas alturas sigue siendo tabú. Sus seguidores no han dudado en aplaudir el valor de la foto. Seguramente muchas mujeres, que adhieren al movimiento que también es conocido como ‘Januhairy’, se vieron reflejadas en Graham.
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¿Qué es ‘Januaryhairy’?
Su objetivo es respetar los cuerpos. Así como los hombres pueden dejarse crecer la barba y mantener intactos el pelo de su cuerpo, ¿por qué las mujeres no? La británica Laura Jackson lo define así: “estamos mostrando en los medios que nos sentimos cómodas y seguras cuando nuestras piernas están suaves, nuestra cejas depiladas, nuestras axilas rasuradas… etc. La sociedad parece comportarse como si el cabello natural que crece en nuestros cuerpos no fuera atractivo o resultase desagradable. Estamos tan acostumbradas a eliminarlo que no nos estamos familiarizando con nuestro auténtico ‘yo’. #JanuHairy es un experimento para que las mujeres se unan, se animen unas a otras y se atrevan a dejar crecer su vello corporal durante el mes de enero”.