Cinco clásicos navideños que no podemos dejar ver
Llega diciembre y todo parece acelerarse. Los regalos, las novenas, las fiestas de fin de año hacen que el ritmo se desborde pues es inevitable dejarse contagiar por el ánimo navideño.
Sigue a Cromos en WhatsApp
Para sacarle el máximo provecho a estas navidades y regocijar con esas historias que han marcado nuestras vidas, portales como Netflix ofrecen una gran oferta de entretenimiento navideño para toda la familia. Si quiere hacer una pausa entre tantos eventos sociales y compras navideñas, le recomendamos hacer plan familiar y mostrarles a sus hijos algunos de esos clásicos que marcaron su infancia y adolescencia, y no necesariamente tienen a Santa Claus, ni a sus renos de protagonistas.
Si aún no la ha visto, prepárese para grandes y espectaculares sorpresas que los tiernos Gremlins le llevan a un pequeño y tranquilo pueblo, al ignorar tres simples recomendaciones: no deje que les de la luz, no deje que se mojen y no les de comida después de la medianoche. Esta comedia de horror en la que unas pequeñas y tiernas mascotas se transforman en monstruos asesinos, es sin duda alguna un gran clásico que nunca dejaremos de amar.
Esta historia de amor que tiene lugar durante un invierno en Nueva York, nos obliga a preguntarnos, cada vez que la vemos, si la amistad entre hombres y mujeres puede sobrevivir sin que el sexo lo dañe todo. Esta gran comedia romántica sin duda es un gran clásico que vale la pena repetir una y otra vez.
Desde siempre Tim Burton nos ha sorprendido con sus extraños y fascinantes mundos. Este clásico de 1990, protagonizado por Johnny Depp y Wynona Rider, nos lleva por el extrañísimo mundo de Edward y su intento de entrar en una conservadora comunidad. Edward es la creación casi humana de un inventor que murió justo antes de poder reemplazar las afiladas cuchillas que Edwards lleva como manos. Vale la pena recordar este cálido y aterrador, tierno y desgarrador, edificante y oscuro clásico.
Esta no es sólo una película para niños. Es una película también para adultos que desde siempre la han amado. Esta comedia no sólo nos hace reír con las ocurrencias del pequeño Kevin que es olvidado solo en su casa cuando toda su familia se va de vacaciones a Francia, sino que toca los corazones de quienes la vieron de pequeños y la repetirán de adultos. Mi pobre angelito siempre ha sido y seguirá siendo una comedia clásica navideña, que nos hará reír y desear volver a ser niños para ver si tal vez, podemos ser tan ingeniosos como Kevin para hacer de las suyas con un par de ladrones que quieren aprovechar las vacaciones de diciembre para hacerse su navidad.
Esta comedia negra en la que tres hermanos planean robar un banco en el día de navidad, no tiene miedo en caer en lugares políticamente incorrectos. No sólo sus diálogos hilarantes lo obligará a retroceder la historia para reírse una y otra vez, sino que es a la vez una película conmovedora.