La comida genera una recompensa al cuerpo, cuando comemos sentimos gusto y satisfacción por los sabores y también, sin embargo ¿Cuándo el dulce puede volverse una adicción?
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Si hablamos de suplir antojos, esos pequeños caprichos a los que nos cuesta resistirnos, los ganadores suelen ser los dulces, pero ¿hay algo detrás de esos antojos?
¿De dónde viene la necesidad de azúcar?
Claudia Guerrico, nutricionista de la unidad de Psicología y Medicina de la Salud, PsicoActúa, del Hospital Vithas Medimar Internacional (Alicante), le dijo a CuídatePlus “probablemente periodos de ayunos prolongados hacen que el nivel de azúcar en la sangre baje demasiado, también un nivel alto de estrés en el cual el cerebro gasta más glucosa, dietas restrictivas o la unión de estos tres factores” esto hace que el cuerpo sienta necesidad de azúcar.
“Me pongo a dieta severa (a base de proteínas y verduras), no como durante 8 horas porque entro a las 8 y salgo a las 15 del trabajo y encima tengo un nivel de estrés importante. En la primera oportunidad que tengas, surge la necesidad fisiológica y emocional de consumir azúcar inmediato, de rápida utilización”, explicó.
Teniendo en cuenta que la glucosa es el alimento del cerebro y aporta energía, el azúcar terminan siendo son calorías vacías, lo cual no aporta ningún nutriente al cuerpo. “Esto sucede porque cuando nos acostumbramos a obtener energía de forma fácil y rápida, el organismo se desacostumbra a trabajar para ello. Así cada vez queremos más. Lo correcto es empezar a practicar la vía más lenta de obtenerla, a través del consumo de hidratos de carbono más complejos, en los cuales la glucosa se va liberando de forma lenta”, especifica Guerrico.
Señales de que puedes ser adicto al azúcar
Desde una perspectiva clínica, “la adicción del azúcar es sinónimo de ansia de carbohidratos. La ingestión de azúcares simples conduce a un aumento de producción de serotonina y, por tanto, a un estado de ánimo calmado tras su ingesta”, destaca la web de salud Cuerpo Mente.
2. No puedes controlar la cantidad. Aunque te propongas comer solo una porción, no puedes parar y luego te sientes culpable, aclaran desde el sitio Mind Body Green. A continuación, más puntos destacados por este portal.
3. No te satisfaces con una porción. Quienes son adictos al azúcar, necesitan cada vez más cantidad para sentirse satisfechos, indica la dietista registrada Jennifer McDaniel, miembro de la Academia de Nutrición y Dietética de los Estados Unidos, a través de la revista Women’s Health.
4. Tienes una personalidad adictiva. Necesitas grandes cantidades de todo, un buen pedazo de torta, es igual que, la ropa o calzado no solamente de dulces. Se genera una especie de dependencia.
5. Comes dulces hasta sentirte mal. Aunque después de ingerir azúcar experimentes dolor de cabeza, fatiga o somnolencia, sueles repetir esta conducta todos los días o varias veces por semana.