Es importante que en las pausas activas se incluya a los niños. En ellos, es aún más necesaria la actividad física y menor tiempo frente a las pantallas.
Pasamos en casa gran cantidad del tiempo trabajando, pero además, actividades que realizábamos antes del confinamiento como caminar para desplazarnos a la oficina, o dentro de la oficina es algo que ya no hacemos y esto puedes traer consecuencias en nuestra salud. Te contamos algunas de esas enfermedades que han aparecido en los últimos meses por permanecer tanto tiempo sentados y a las que debes prestar atención para evitar mayores complicaciones.
Obesidad: está demostrado que al moverte, tu cuerpo libera moléculas que ayudan a procesar los azúcares, por lo que resulta lógico que si permaneces mucho tiempo sentado, ese proceso no se da y aparecerá el sobrepeso y con el tiempo la obesidad. Además, la mayoría de personas que trabajan desde casa suelen comer en sus “puestos de trabajo”.
Sigue a Cromos en WhatsAppMala circulación: cuando se está sentado por largos periodos de tiempo también se ve afectada nuestra circulación. En casos graves las venas se pueden obstruir y aparecer la trombosis venosa. La recomendación es que cada hora te levantes por al menos 5 minutos, hagas estiramientos, camines o realices sentadillas.
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Azúcar alta: aunque te cueste creerlo el estar sentado puede provocar azúcar alta porque estar quietos impide que la insulina funcione de manera adecuada. Realízate un chequeo y acude al médico de ser necesario.
Osteoporosis: actividades como correr o caminar ayudan muchísimo a fortalecer los huesos de la cadera y la parte inferior de nuestro cuerpo. De acuerdo al reporte de centros médicos en todo el mundo, los casos de osteoporosis han aumentado debido a la falta de actividad física durante la pandemia.
Problemas en el páncreas: cuando no hacemos actividades para que nuestro cuerpo y órganos trabajen adecuadamente, conforme pasa el tiempo, da lugar a la aparición de enfermedades como la diabetes. Procura realizar algún ejercicio a cierta horas del día, o al menos un par de veces por semana. También es clave el consumo de agua. Estar hidratado mantendrá tu cuerpo en óptimas condiciones.
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