Leche de quinoa, ideal para la alimentación de tus hijos

Considerada según la Organización Mundial de la Salud (OMS) tan completa nutricionalmente como la leche de vaca, es una de las bebidas más selectas al momento de obtener niveles altos de proteína. Debido a que es rica en lisina, metionina y cistina, es de fácil digestión. Contiene cuatro veces más calcio que el trigo, así como hierro y vitaminas B, C y E. Además, es una excelente fuente de magnesio, hierro, potasio, ácidos grasos y omega 3 y 6. Podemos encontrarla en polvo o líquida.

La leche de quinoa al igual que la leche de almendras, es libre de gluten. Contiene lisina, un bloque de construcción para la síntesis de elastina y colágeno. Ambos factores promueven una piel suave y flexible. Es esencial para la alimentación de los niños, ya que promueve el adecuado desarrollo de todos los sistemas en especial nervioso y musculoesquelético.

Ingredientes

-1 taza de granos de quinoa

-2 tazas + 5 – 6 tazas de agua

-1 cucharadita de extracto de vainilla.

-1 cucharadita de canela molida

-1 cucharada de jarabe de agave o de abejas  (opcional para endulzar)

Preparación

Deja remojando la quinoa durante la noche. Retira el agua al momento de prepararla. Cocina 1 taza de quinua con 2 tazas de agua. Una vez cocida, añade sólo la quinoa a la licuadora con 2 tazas de agua. Mezcla en alto hasta que quede suave. Añade agua hasta lograr la consistencia deseada, mezclando después de cada adición. Se puede necesitar hasta 6 tazas de agua. Agrega el extracto de vainilla y la canela. Cuela con un colador de tela, dejando sólo la pulpa. Puedes endulzar con el agave si quieres una leche más dulce. Puedes servir fría o caliente.

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