Masaje relajante: ¿quién lo debe hacer y cuáles son sus beneficios?

Masaje relajante: ¿quién lo debe hacer y cuáles son sus beneficios?

Fotografía por: Pixabay

Un excelente masaje relajante aumentará la producción de endorfinas en nuestro cuerpo, mejorará la circulación sanguínea y linfática y consigue aliviar el estrés.

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Daysi Torres, empresaria y emprendedora colombiana, creadora de Kalika Spa, un centro de bienestar y belleza nos da las claves para tener un masaje relajante y algunos beneficios que obtenemos a través de esta técnica.

¿Cómo hacer un masaje relajante?

Sin duda alguna la magia está en hacer presión suave y con ritmo constante, pero antes de hablar del cómo es importante tener presente que existen unas condiciones previas para que el efecto del masaje se potencialice en todo el cuerpo.

Antes de realizar este masaje es importante tener en cuenta lo siguiente:

• Espacio tranquilo, rodeado de naturaleza exclusivo para estos masajes, con sonidos naturales, poca luz y temperatura agradable.
• Antes de empezar el masaje, hacemos nuestro protocolo de bioseguridad, lavamos manos y calcetamos con toallas al horno esterilizadas.
• Utilizamos aceites vegetales de diferentes propiedades acorde a lo que desea la persona, nuestro favorito lavanda (relaja totalmente y le permite descansar en su masaje), así mismo utilizar esencias para aliviar el dolor muscular por estrés como albahaca salvia, jengibre, enebro, menta y romero. Por otro lado, para lograr la relajación mental, utilizamos aceites esenciales como manzanilla, mejorana, rosa, lavanda y jazmín.
• Toallas limpias
• Velas
• Aromaterapia
• Sin duda alguna el silencio acompañado de música relajante es el toque mágico perfecto.

6 pasos para realizar un masaje relajante:

1.EMPEZAR CON MASAJE EN CUELLO Y ESPALDA.

Usamos la técnica de presionar y soltar para masajear a lo largo de los hombros, cuello y hasta la raíz del cabello. Colocamos las manos en cada hombro en la posición clásica de masaje y amasamos con pulgares profundamente en los músculos de los hombros.

Seguido a esto, nos desplazamos para estar de pie frente a la cabeza de la persona, de esta manera sus hombros están en dirección hacia nosotros, frotamos los nudillos suavemente, pero a la vez firmemente, a lo largo de la parte superior del hombro. De esta manera liberamos la tensión.

2. SEGUIMOS CON LOS PIES.

Masajeamos la planta de los pies con ambas manos y con los pulgares hacemos presión especialmente al arco de cada pie, ya que esta área es donde acumulamos mucha tensión. Masajeamos dedo por dedo halándolos suavemente, esto ayudará a liberar la tensión.

3. SEGUIMOS CON LAS PIERNAS.

Una vez terminado los pies, seguimos con la parte trasera de las piernas, masajeamos de la pantorrilla hasta la parte superior del muslo. De allí presionamos ligeramente con ambas manos y estiramos suavemente la piel.

Siempre cubrimos con una toalla el área ya terminada para mantener el calor y repetimos el masaje en la otra pierna.

4. SEGUIMOS CON LA ESPALDA.

Nos colocamos de pie frente a la persona, boca abajo y masajeamos desde la parte baja hasta la parte más alta de la espalda, realizamos frotaciones largas y suaves, desde la parte superior de los glúteos hasta la base del cuello.

Utilizamos la técnica de “presionar y soltar” para trabajar la parte de arriba de la espalda. presionamos firmemente con las puntas de los dedos sobre la piel de la espalda antes de soltar rápidamente para brindar sensación placentera a nuestros clientes.

Doblamos los codos, para tener un mayor acceso al músculo que está alrededor del borde de los omóplatos, donde acumulamos mucha tensión y nudos.

5. SEGUIMOS CON LOS BRAZOS:

Trabajamos con uno a la vez. Empezamos sosteniendo la muñeca de nuestro cliente con la mano izquierda para que todo su brazo esté levantado de la cama, con la mano derecha hacemos movimientos circulares a lo largo de la parte posterior del antebrazo, tríceps y sobre el hombro, hacemos lo mismo en el lado opuesto.

Masajeamos las manos con los pulgares y hacemos movimientos circulares pequeños, después agarramos dedo por dedo y halamos con firmeza.

6. FINALIZAMOS CON LA CABEZA.

Colocamos a las personas boca arriba, para trabajar la cabeza y la cara.

Usamos nuestros pulgares para masajear suavemente la parte superior del cuero cabelludo, para añadir un toque más de placer, utilizamos un masajeador de cabeza que adicional, aportar otros beneficios, como la prevención de los dolores de cabeza, la caída del cabello, y estimula la circulación de la sangre.

Masajeamos los lóbulos de la oreja, debajo de la cabeza levantándola suavemente de la cama, cráneo, masajeamos la mandíbula y halamos la cabeza suavemente hacia arriba para estirar los músculos del cuello. Con la punta de los dedos presionamos ligeramente el centro de la frente, entre las cejas y terminamos masajeando suavemente las sienes con movimientos circulares, esta área es un punto de acupresión importantes, así que esto ayuda a liberar tensión.

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¿Quién debe hacer un masaje?

Los masajes que proporcionan bienestar y relajación, son totalmente actos para profesionales esteticistas y masajista. Estos masajes profesionales son ideales para relajarnos y sentir nuestro cuerpo en armonía.

¿Cuáles son los beneficios del masaje relajante?

Al realizar el masaje la circulación mejora y llega más sangre y oxígeno fresco a los tejidos, aumentando así la producción de glóbulos blancos y rojos en la sangre, adicional mejora la circulación de los líquidos linfáticos. Todo esto ayuda a que el cuerpo se recupere más rápidamente.

En cuanto a temas emocionales está confirmado científicamente que nuestros cuerpos albergan emociones a veces no tan sanas y si liberamos nuestras emociones, liberamos de cargas a nuestro cuerpo.

9 beneficios del masaje relajante:

• Alivia la tensión muscular.
• Elimina el cansancio y renueva la energía perdida.
• Previene lesiones físicas.
• Calma los dolores de cabeza y de espalda causados por la tensión nerviosa diaria.
• Nutre y mejora la calidad de la piel.
• Mejora el humor, ya que, al recibir un masaje, nuestro cuerpo libera endorfinas, que nos proporcionan una sensación de bienestar y ayudan como analgésicos endógenos que eliminan de un modo natural el dolor.
• Mejora la autoestima.
• Tiene un efecto sedante y relajante; calma la mente disminuyendo estados de estrés y combate el insomnio.
• Aumenta los niveles de serotonina, que actúa como neurotransmisor del sistema nervioso central haciendo que mejore nuestro estado anímico y combatiendo la depresión.