Los tapetes son esenciales para darle calidez y estilo a cualquier espacio, pero también son imanes para el polvo, la suciedad y las manchas.
Si estás buscando una forma sencilla y eficiente de mantener tus tapetes impecables, este artículo te dará los mejores trucos para hacerlo sin esfuerzo.
Sigue a Cromos en WhatsApp¿Cómo limpiar un tapete?
Los tapetes pueden acumular alérgenos como polvo, ácaros y pelos de mascotas, lo que podría afectar tu salud, especialmente si sufres de alergias. Además, un tapete limpio mantiene el ambiente fresco y prolonga su vida útil.
Mantener los tapetes limpios no tiene que ser una tarea tediosa.
Según expertos en limpieza de textiles, una buena rutina de mantenimiento puede reducir hasta un 80% el desgaste de los tapetes.
Limpiarlo no tiene que ser complicado. Con herramientas básicas y algunos productos caseros, puedes devolverle su aspecto original.
- Aspiradora: Es el paso más básico. Usa una aspiradora con buen poder de succión para eliminar polvo y residuos superficiales.
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- Bicarbonato de sodio: Espolvorea bicarbonato sobre el tapete y déjalo actuar por 30 minutos. Luego aspíralo. Esto ayudará a eliminar olores y absorber grasa.
- Agua y vinagre blanco: Mezcla partes iguales de agua y vinagre blanco en un atomizador. Rocía sobre manchas específicas y frota suavemente con un paño limpio.
- Cepillo de cerdas suaves: Si el tapete tiene suciedad incrustada, utiliza un cepillo para trabajar sobre la superficie sin dañar las fibras.
Por otro lado, uno de los trucos más populares y efectivos es usar espuma para alfombras o detergente en seco, que están diseñados específicamente para descomponer la suciedad sin necesidad de enjuague.
Pasos para usar detergente en seco:
- Asegúrate de que el tapete esté seco: Aspira para quitar residuos sueltos.
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- Aplica el producto: Distribuye uniformemente el detergente en seco.
- Déjalo actuar: Permite que el producto repose el tiempo indicado en la etiqueta (generalmente 20-30 minutos).
- Aspira nuevamente: Elimina el detergente junto con la suciedad.
Este método es ideal para tapetes delicados o de materiales difíciles de lavar, como lana o seda.
