Para evitar infecciones, esto es lo que debes saber sobre el cordón umbilical y sus cuidados
En el momento del nacimiento, los doctores cortan el cordón umbilical, canal de nutrición del bebé en el vientre. Esto hace que quede un muñón que con el paso de los días se ennegrece y se seca hasta desprenderse. Esto se conoce como la caída del ombligo.
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A pesar de que es algo normal, puede causar cierta impresión y generar dudas al no saber cuándo se suele caer el ombligo de los bebés y los cuidados del cordón umbilical, mientras se desprende.
La caída del cordón umbilical
Inmediatamente después del nacimiento, el cordón umbilical es claro, pero con el paso de los días empieza a verse más seco y oscuro, hasta que naturalmente se cae. En cada bebé es distinto, sin embargo, de acuerdo con los pediatras, se calcula que el cordón se desprende del vientre del recién nacido entre la 2da y la 3ra semana de vida y tarda entre 3 y 5 días más en cicatrizar la herida.
Mientras en algunos niños el cordón umbilical puede desprenderse al 5to día de nacidos, en otros dura hasta el día 20 de vida. No te preocupes, ambos casos son absolutamente normales.
Si notas que se aproxima el final del primer mes y no se ha desprendido, puedes consultar al pediatra para que haga una revisión y verifique si no hay alguna anomalía en el ombligo de tu bebé.
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Lo más importante es que en ningún caso lo estires para acabar de desprenderlo, aunque el hilo a que haya quedado sosteniendo sea muy fino, ya que podrías ocasionar una hemorragia en el ombligo.
¿Qué sucede cuando se desprende el cordón umbilical?
Lo más probable es que en el momento en que se desprenda el ombligo de forma natural, sangre un poco, pero la hemorragia se detiene por sí sola muy rápidamente.
La cicatrización de la herida se da durante la semana después de la caída y, mientras esto sucede, debes seguir realizando las limpiezas y curas para lograr que se seque perfectamente.
Es normal que durante esos días te encuentres con pequeños restos de sangre seca en los pliegues internos, por esto es por lo que debes seguir haciendo las curaciones ya que el riesgo de infección seguirá hasta que el ombligo haya cicatrizado bien.
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Paso a paso: cómo hacer las limpiezas y curaciones en el ombligo
- Lava bien tus manos antes de la curación
- Limpiar la zona del cordón con agua tibia y jabón neutro. Puedes ayudarte con una gasa o toallita suave
- Posteriormente, sécalo bien o deja la zona airearse un poco, antes de poner el pañal
- Puedes ayudar a mantener seco el cordón con una gasa limpia y seca que quede envolviendo la zona, haciendo cambio de la gasa junto con los pañales
- Recuerda que es fundamental cambiar frecuentemente los pañales del bebé