Un embarazo es el inicio de una emocionante travesía, pero no siempre ocurre como se espera. En casos raros, el embarazo puede desarrollarse fuera del útero, lo que se conoce como embarazo ectópico.
Este tipo de gestación ocurre con mayor frecuencia en las trompas de Falopio, pero también puede presentarse en otras áreas, como los ovarios o la cavidad abdominal, según indica la Clínica Mayo.
Sigue a Cromos en WhatsApp¿Por qué ocurre un embarazo ectópico?
De acuerdo con un informe desarrollado por esta clínica, considerada una de las mejores del mundo, la mayoría de los embarazos ectópicos se deben a que el óvulo fecundado no logra llegar al útero. Las trompas de Falopio, encargadas de transportar el óvulo desde los ovarios, pueden verse afectadas por inflamaciones, malformaciones o cicatrices, lo que impide que el óvulo siga su curso.
Factores como un embarazo ectópico previo, infecciones de transmisión sexual y tratamientos de fertilidad pueden aumentar el riesgo de experimentar este tipo de embarazo.
Aunque no hay una manera segura de evitar un embarazo ectópico, existen formas de reducir el riesgo. La Clínica Mayo sugiere limitar el número de parejas sexuales y utilizar preservativos para reducir las probabilidades de infecciones de transmisión sexual. Además, dejar de fumar antes de quedar embarazada puede disminuir las posibilidades de sufrir este tipo de embarazo.
Señales de advertencia de un embarazo ectópico
Al inicio, el embarazo ectópico puede parecer normal, con síntomas comunes como ausencia de menstruación, náuseas o sensibilidad en los senos. Sin embargo, a medida que el óvulo crece en un lugar inadecuado, los síntomas empeoran.
Las primeras señales incluyen un leve sangrado vaginal y dolor pélvico. Si el embarazo no se detecta a tiempo, puede romperse la trompa de Falopio, lo que provoca un sangrado interno severo y pone en riesgo la vida de la persona. Por esto, la clínica recuerda que es importante buscar atención médica de inmediato si experimentas dolor abdominal intenso, desmayos o dolor en el hombro, síntomas que pueden indicar una ruptura tubárica.
¿Puede sobrevivir el feto a un embarazo ectópico?
Como un embarazo ectópico ocurre cuando el óvulo fertilizado se implanta fuera del útero, infortunadamente “el bebé suele morir en el 99.9% de los casos”. Ya que este tipo de embarazo no puede desarrollarse completamente, este inmediatamente se convierte en una situación de riesgo para la madre.
Entonces, ¿cómo se retira el feto para evitar complicaciones en la vida de la mujer? El tratamiento puede realizarse de dos maneras. Primero, con el metotrexato, un medicamento que interrumpe el embarazo sin dañar las trompas de Falopio, permitiendo que el cuerpo absorba las células.
Ahora bien, si el medicamento no es viable, se recurre a la cirugía laparoscópica, que retira el embarazo ectópico a través de un pequeño corte cerca del ombligo. Sin embargo, este procedimiento podría causar cicatrices o la pérdida de una trompa de Falopio. Por esto es esencial que un profesional médico determine cuál es el mejor tratamiento según cada caso.
¿Puede haber un embarazo ectópico en el abdomen?
Aunque el embarazo ectópico abdominal es una condición extremadamente rara y peligrosa, sí es viable que se dé, como lo explican las especialistas Susana Soto-López, Karen Isabel González-Montenegro y Cinthya Zamora-López en un estudio de caso de una mujer primigesta (que solo ha estado embarazada una vez) de 23 semanas.
En este tipo de embarazo, el óvulo fecundado se implanta fuera del útero, en la cavidad abdominal, lo que aumenta significativamente los riesgos para la madre y el feto.
El diagnóstico es complicado debido a la ausencia de síntomas claros, que pueden variar desde un dolor abdominal intenso hasta la ausencia total de molestias. Las imágenes diagnósticas, como el ultrasonido y la resonancia magnética, son esenciales para identificar la localización del feto y la placenta, que suelen encontrarse fuera del útero.
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En el caso presentado, la paciente fue diagnosticada mediante ultrasonido en su primer control prenatal, y se confirmó un embarazo abdominal avanzado con fetometría de 26 semanas. Tras complicaciones que incluyeron dolor abdominal severo, se decidió una intervención quirúrgica de emergencia para salvar la vida de la madre. El recién nacido, un bebé masculino, falleció a las pocas horas debido a malformaciones congénitas y complicaciones asociadas a la prematuridad.
De acuerdo con los resultados finales del estudio, este tipo de embarazo está asociado a un alto riesgo de mortalidad tanto materna como fetal, siendo la hemorragia uno de los mayores peligros durante el proceso de separación de la placenta, que en este caso fue removida sin mayores complicaciones. El seguimiento médico y los controles posteriores son esenciales para monitorear la salud de la madre.