A través de la ropa, Coco Chanel cambió la vida de las mujeres de su tiempo. / AFP
Han pasado 100 años, pero el estilo de hace un siglo, ese que consagró a Coco Chanel, está más de moda que nunca. La diseñadora nos liberó del terrible corsé, creó el traje de pantalón y nos motivó a que nos cortáramos el pelo para lucirlo como el de los jovencitos... Su estilo traspasó fronteras y recorrió el mundo.
Convertida en la gran dama de la moda francesa, ella misma fue la principal modelo de su firma: delgada, con poco pecho y el pelo corto, con ropa ancha y cómoda, Chanel se convirtió en el prototipo de la mujer moderna, activa y liberada. Imitada por millones de mujeres, algo de su estilo está presente en cada colección del siglo XXI.
Sigue a Cromos en WhatsAppCuando Chanel cumplió 22, se enamoró ciegamente de Étienne Balsan, un joven burgués adinerado con el que mantuvo una relación de seis años. Él le enseñó la lujosa vida de las capitales. Ella tenía la idea de abrir una sombrerería, pero Balsan estaba reticente, así que se marchó con Arthur Boy Capel, un jugador de polo que se conviritió en su benefactor y la acercó a su sueño: tener una reputada casa de modas.
En 1914 compró en las Galerías Lafayette varias docenas de sombreros que ella misma personalizó. Cuando salieron a la venta tuvieron gran éxito, pero no fue suficiente. Eventualmente lo dejó todo para emprender un nueva vida en Estados Unidos. Allí conoció al cofundador de la Metro-Goldwyn-Mayer, Samuel Godwing y comenzó a vestir a las estrellas de Hollywood, tanto dentro como fuera de las películas.
Su estilo ha pasado de generación en generación en Los Angeles. La modelo y actriz Kaia Gerber ha sido una de las últimas en lucir el corte de pelo que dejó la diseñadora. Lo mismo ocurrió con la hija de Cindy Crawford, quien 100 años después ha lucido una ondas al agua con el pelo muy pegado y cortico.
Chanel también impuso el collar de perlas y creó pantalones para las mujeres, ella consideraba que después de la Primera Guerra Mundial la falda no era funcional, sin embargo no la desechó, más adelante creó diferentes largos y diseños plisados. También introdujo como prenda femenina el vestido camisa e, incluso, fue la artífice de que se comenzara a tomar el sol.
En los años 50 revolucionaría el mundo del calzado: nos bajó de los tacones y creó el famoso zapato slingback: un zapato que combina el negro y el beige, que tiene la punta redondeada y un tacón de cinco centímetros. Hace tres temporadas, este modelo estuvo en furor entre las influencers... Y es que se puede decir que Coco era ella toda una influencer sin necesidad de redes sociales. La sutileza del slingback reside en que ella pensó en un zapato para todas la ocasiones, combinaría con todo y su color estilizaría la figura por su efecto óptico.
El tejido tweed, los bolsos de cadena, los impermeables, las pijamas playeros, los zapatos bajos... Coco Chanel fue una fuente de inspiración y, sobre todo, de innovación. Aún hoy está presente en los peinados y en las pasarelas de grandes firmas. Muchas son las cosas que le debemos a Coco Chanel.