Foto: Cortesía.
Las tendencias de moda y la libertad para adoptarlas según los gustos, la personalidad y ocasión de uso, invitan a explorar opciones que se salgan de lo común y aporten diversión al vestuario cotidiano. Está bien no guiarse estrictamente por la regla de combinación sino en cambio, animarse a experimentar con otras alternativas. En definitiva, sí es posible llevar la cartera de un color y los zapatos de otro.
Estas propuestas son presentadas por las empresas pertenecientes al programa Brazilian Footwear promovido por la Asociación Brasileña de las Industrias de Calzados, Abicalçados, en asocio con la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones, Apex-Brasil.
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Para tener en cuenta: los colores pueden contrastar, por ejemplo: cartera azul y zapatos amarillos o un bolso marrón y zapatos de color arena. Lo importante es que la combinación con el vestido se vea armónica, estética. Si el vestido es estampado, los colores de la cartera y los zapatos pueden elegirse según los tonos que más resalten en el vestido.
La idea es mezclar estilos y texturas siguiendo estos cuatro consejos:
• Si quieres apostarle a un look con cartera estampada, llevar el vestido y los zapatos en un tono unicolor, es una buena alternativa.
• Si deseas combinar la cartera y el calzado, juega a experimentar con texturas diferentes, por ejemplo, zapatos de cuero liso y cartera de gamuza.
• Los tacones en tonos café, beige, blanco o negro son un clásico que acierta en cualquier momento. Destácalos con una cartera de diferente color.
• Combina el outfit con materiales metalizados, le darán a tu look un estilo versátil para el día o la noche.
Recuerda que los zapatos color nude o piel, hacen lucir más largas las piernas y su tono neutro permite que se acentúe el protagonismo de una cartera muy llamativa con la que puedes arriesgar en color o estampación.
Por último, ten en cuenta que acentos como la cartera, los zapatos o un cinturón en estampado animal print, son un must según las tendencias para fin de año. Experiméntalo, es divertido y entrena el ojo en la acción de vestir accesorios con mayor riesgo.