El creciente gusto del mundo occidental por la moda rápida y desechable, alimentada por el suministro y disponibilidad de productos económicos, significa que se está consumiendo y al mismo tiempo deshaciéndose de cantidades cada vez más grandes de ropa.
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Sin embargo, ya frases como: respeto por el medio ambiente, economía circular, ahorro de dinero dando segundas oportunidades, contribuir a bajar la explotación laboral y crear un propio estilo, se vienen consolidando fuertemente entre los consumidores en el mundo y en Colombia.
Ropa de segunda mano: ¿Por qué es buena?
De acuerdo con la ONU, la industria textil es la segunda más contaminante del mundo. Por eso y gracias al impulso creado por plataformas online cada vez más populares, el mercado de segunda mano se está consolidando como una alternativa ecológica creíble, frente a la compra de ropa nueva.
La economía circular textil crece 25 veces más que el retail y los consumidores prefieren marcas que sean cada vez más sostenibles. La ropa usada representaba 3 % del closet de una mujer y se estima que para el 2029 sea más del 25 %, para el caso de los Estados Unidos. Esto demuestra que los consumidores exigen y buscan hoy, un reaprovechamiento de telas, que se puedan reutilizar, rehacer o reciclar, buscando además para su consumo, prendas con materias primas más sostenibles.
Comprar ropa de segunda mano está siendo una tendencia latente en la industria de la moda. Te contamos más.
A nivel global, la venta de ropa de segunda mano representa entre 3 % y 5 % e incluso podría llegar a tener el 40 % del mercado.
En ese sentido, los productos de reventa ocupan, aproximadamente, una cuarta parte de los armarios de los compradores de prendas usadas y se espera que llegue a 27 % en este 2023. Así lo deja ver un estudio de Boston Consulting Group y Vestiaire Collective denominado ‘What an Accelerating Secondhand Market Means for Fashion Brands and Retailers’. Esta economía de moda circular deja un valor estimado que oscila entre US$100.000 millones y US$120.000 millones, una cifra que triplica la de 2020.
Closeando es la primera tienda de ropa online en Colombia, que ofrece a sus clientes la oportunidad de alcanzar una gran variedad de marcas a precios sorprendentes. “Tenemos más de 20.000 marcas entre las cuales figuran Zara, Mario Hernández, Vélez, Studio F, Carolina Herrera, Michael Kors, BCBG, Stradivarius, Esprit, entre otras, con prendas o artículos que fueron utilizados una vez o unas pocas veces y se quedaron en el fondo del clóset”, afirmó Elisa Ferrer, socia y creadora de la marca mencionada.
En el país, la conciencia sobre el problema ambiental que genera la industria textil es incipiente, “Somos los pioneros de venta online de ropa de segunda mano en Colombia que ofrece a sus clientes la oportunidad de alcanzar marcas de lujo y tradicionales, casi nuevas, a precios insólitos”, agrega.
Además de su sólido respaldo en la industria, Closeando encontró apoyo en el ámbito académico, colaborando estrechamente con instituciones prestigiosas como la Universidad Javeriana, la Universidad Externado y la Universidad del Rosario. Estas alianzas estratégicas no solo les brindaron conocimientos y experiencia, sino que también les permitieron explorar nuevas formas de promover la moda sostenible y educar a la comunidad sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar.
La empresa asegura un control de calidad del más alto nivel, lo que permite una venta segura a sus clientes. Closeando se inspira en las tendencias ‘garage’ y en empresas innovadoras alrededor del mundo que implementan un sistema similar, tales como como Percentil y MiColet en Europa, Thredup y The Real Real en USA, entre otras, y lo adaptaron a la consumidora colombiana. “En Colombia existen tiendas de compra y venta de ropa usada, pero ninguna te brinda la comodidad y discreción de comprar o vender desde su hogar, ni le garantizan la perfección absoluta de los productos”, sostuvo Ferrer.
Los consumidores que más están dispuesto a comprar ropa de segunda mano son mujeres, entre 18 y 65 años, con preferencia por la moda. 41 % de las mujeres entre 18 y 25 años, es un grupo dispuesto a comprar estas prendas.