Fotos: Juan Zarama.
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La marca de eventos Verano Suite llegó hace cuatro años a Colombia, con el fin de acercar la moda a sus fieles seguidores. A la cabeza del proyecto está la experta en marketing de moda, Corina Salazar, quien se ha encargado de crear espacios diferentes para que las personas que adoran la ropa encuentren las últimas tendencias y se dejen seducir por ellas en ambientes más acogedores que un almacén. Sus montajes en lugares lujosos y no tradicionales parecen exposiciones de arte, dónde los asistentes disfrutan del diseño y, de paso, pueden llevarse a casa lo que más les haya gustado de varias marcas reconocidas.
“Yo siempre veía que cuando se hacían eventos de moda la ropa no se vendía –explica Salazar–. Están los desfiles en los que se lanzan colecciones, hay un gran cubrimiento por parte de los medios de comunicación, los asistentes se ponen guapísimos y siempre hay un coctel; ¡son fiestas para la moda, pero las marcas no venden! Por otro lado, existen los bazares, donde sí se puede comprar, pero en espacios más informales, como parques o zonas públicas. Entonces pensé en un concepto que fusionara el lujo y la intención de compra. La idea era poner, durante una noche, muchas marcas en un solo lugar, donde no solo pudiera vender, sino captar la atención de los medios de comunicación y hacer networking en un ambiente completamente lujoso”.
Joyas: Paola Q. y zapatos: Bibiana Hernández.
La idea ha sido un éxito. En Bogotá se han realizado 15 eventos, desde el año pasado hasta la fecha, –se ha tomado hoteles como el W, Casa Medina y el Four Seasons–. En Medellín, van dos. Y en Cali y Miami uno.
Después de darse cuenta de que el concepto funcionaba, Salazar abrió un showroom permanente en un apartamento en Bogotá. La idea es muy diferente a las tiendas que ofrecen varias marcas, ya que los asistentes tienen una atención privilegiada, especializada e íntima. Pueden compartir entre amigas, conversar, tomar algo. En un futuro, Salazar planea realizar talleres, cursos y actividades de empoderamiento femenino en torno a la moda.
Vanesa López y Corina Salazar con la diseñadora de joyas Paola Q.
El apartamento es muy cálido y acogedor. Los 200 metros cuadrados que uno recorre están llenos de arte, moda y diseño. El ambiente está tan bien pensado que es inevitable no salir encantado con decenas de prendas y objetos. En este showroom, contrario a lo que ocurre en los eventos itinerantes, también hay marcas inmobiliarias, de decoración y diseño de interiores. Por esta razón, además de carteras, zapatos, ropa, pijamas, joyas y vestidos de baño, se pueden encontrar matas, difusores de aroma, cuadros de arte, libros, mesas, lámparas, cobijas, tapetes, puffs y hasta sofás.
El espacio está divido en cinco momentos. El principal reúne todo lo que uno debe tener en el hogar. El segundo, es un cuarto con una cama preciosa, donde se encuentran vestidos de baño y ropa interior. El tercero es un escenario para el arte, con cuadros y libros Taschen. Luego está el lugar de la ropa y, después, otro para los aretes, collares, anillos, carteras y zapatos. Todos los objetos son de diseñadores latinoamericanos para que sus clientes apoyen el trabajo que se realiza en la región.