Clímax de la mujer: otras formas de alcanzarlo más allá de la penetración
El orgasmo femenino, también llamado clímax de la mujer, no depende exclusivamente de la penetración. Nuevas investigaciones desmitifican el placer femenino y revelan caminos innovadores para disfrutar de una sexualidad plena y auténtica.
Por Redacción Cromos
07 de diciembre de 2024
El placer femenino ha estado rodeado de mitos que limitan la comprensión de su complejidad. Durante décadas, la narrativa centrada en la penetración como la “meta” principal ha eclipsado otras formas de experimentar el clímax de la mujer.
Sin embargo, gracias a investigaciones como las de Emily Nagoski, autora del aclamado libro “Tal como eres”, las mujeres están descubriendo maneras revolucionarias de conectar con su cuerpo y alcanzar el orgasmo.
¿Cómo se puede llegar al clímax de la mujer durante el sexo?
En este artículo exploramos tres métodos fascinantes que no solo rompen tabúes, sino que también colocan el placer femenino en el lugar que merece: en el centro de la conversación:
1. La magia de la estimulación externa: el poder del clítoris
Solo el 25% de las mujeres alcanza el orgasmo exclusivamente a través de la penetración, según diversos estudios. Esto resalta la importancia del clítoris, un órgano diseñado exclusivamente para el placer. Ya sea con las manos, juguetes sexuales o incluso técnicas de masaje, explorar esta zona puede abrir la puerta a un mundo de sensaciones intensas y así llegar al clímax de la mujer. Además, la clave está en la comunicación: hablar con la pareja sobre preferencias y ritmo puede transformar la experiencia.
Sigue a Cromos en WhatsApp2. Juego mental: la mente como detonante del placer
El cerebro es el órgano sexual más poderoso. Visualizaciones, fantasías eróticas y la lectura de literatura sensual son herramientas que muchas mujeres usan para intensificar su placer. Emily Nagoski destaca en su obra que el contexto emocional y la relajación son fundamentales. Crear un ambiente libre de estrés, con música, aromas agradables o iluminación tenue, puede ser el catalizador para un clímax inolvidable.
3. La revolución de los puntos erógenos olvidados
Además del clítoris, otras zonas del cuerpo como los senos, el cuello, la espalda baja o incluso las muñecas, tienen el potencial de ser altamente sensitivas y así llegar al clímax de la mujer. Explorar estas áreas con caricias, besos o juguetes eróticos ayuda a diversificar el mapa del placer. Cada cuerpo es único, y descubrir qué áreas generan mayor respuesta es una experiencia empoderadora.
Solo el 25% de las mujeres alcanza el orgasmo exclusivamente a través de la penetración, según diversos estudios.
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Queda claro que la revolución del orgasmo femenino no solo pasa por derribar mitos, sino por empoderar a las mujeres para que reconozcan y celebren su cuerpo. El clímax, lejos de ser un destino único, es un viaje diverso y personal que puede encontrarse en lugares inesperados.
Explorar, comunicarse y experimentar son las claves para redescubrir el placer desde una perspectiva liberadora. El verdadero desafío está en romper las cadenas del tabú y abrazar la riqueza de la sexualidad femenina en todas sus formas.