¿El sexo genera adicción en las personas sin que se den cuenta? Esta es la verdad
El sexo, a lo largo de la historia, ha generado la duda sobre si es una necesidad biológica para procrear o algo más profundo.
Por Redacción Cromos
03 de julio de 2024
Afirmar que el sexo es una adicción sin más es algo muy corto. A diferencia de las drogas o el alcohol, el sexo es una parte fundamental de la experiencia humana. Es esencial para la reproducción y juega un papel importante en nuestras relaciones íntimas.
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En las últimas décadas, la ciencia ha comenzado a arrojar luz sobre este complejo tema. Estudios han demostrado que la actividad sexual desencadena la liberación de dopamina, un neurotransmisor asociado al placer y la recompensa. Esto sugiere que el sexo puede tener un efecto adictivo en el cerebro.
Sigue a Cromos en WhatsApp¿Cuáles son los tipos de adicciones sexuales?
La adicción sexual, también conocida como trastorno de hipersexualidad o dependencia sexual, se caracteriza por una obsesión incontrolable con pensamientos, fantasías y comportamientos sexuales que generan un impacto negativo en la vida personal, familiar, laboral y social del individuo.
A diferencia de una sana sexualidad, que se basa en la intimidad, el amor y el respeto mutuo, la adicción sexual se nutre de la compulsión, la búsqueda desmedida de gratificación instantánea y la incapacidad de controlar los impulsos.
De acuerdo con un estudio publicado por Mayo Clinic, “el comportamiento sexual compulsivo puede abarcar distintos tipos de experiencias sexuales que suelen ser agradables. Algunos ejemplos son la masturbación, la excitación sexual mediante comunicaciones por computadora, varias parejas sexuales, el consumo de pornografía o pagar por tener relaciones sexuales”.
Sin embargo, cuando estas conductas sexuales “se convierten en la principal y constante preocupación en la vida, son difíciles de controlar, causan problemas o perjudican a la persona o a otros, es probable que se trate de un comportamiento sexual compulsivo”.
En 2014, se publicó un estudio que encontró similitudes en la actividad cerebral entre aquellos considerados “adictos al sexo” al ver pornografía y los adictos a sustancias cuando se les expone a su droga favorita.
Para ese momento, Valerie Voon, autora principal de la investigación de la Universidad de Cambridge, Reino Unido, le contó a la BBC: “Éste es el primer estudio que se centra en personas que sufren estos desórdenes y que se observa su actividad cerebral, pero no creo que ahora entendamos lo suficiente como para decir que se trata, claramente, de una adicción”.
“Creer que alguien puede ser adicto al sexo depende en gran medida de lo que uno considere que es una adicción, y actualmente no hay una definición oficial aceptada”, destacó el medio mencionado.
Frederick Toates, profesor emérito de la Universidad Abierta de Reino Unido destaca que si una persona llega a depender fisiológicamente de algo y su privación puede causarle daño físico, entonces el sexo “no puede ser una adicción”.
Por otro lado, Mayo Clinic destacó algunos signos que advierten que una persona tiene un posible comportamiento sexual compulsivo:
- Tienes fantasías sexuales reiteradas e intensas, impulsos y comportamientos que consumen gran parte de tu tiempo y parecen ser imposibles de controlar.
- Sientes la necesidad o tienes un impulso frecuente por llevar a cabo determinados comportamientos sexuales y luego experimentas un alivio de la tensión, pero también sientes culpa o un profundo pesar.
- Has intentado sin éxito reducir o controlar tus fantasías sexuales, impulsos o comportamientos.
- Usas el comportamiento sexual compulsivo como una vía de escape a otros problemas, como la soledad, la depresión, la ansiedad o el estrés.
- Sigues teniendo comportamientos sexuales a pesar de que te causen graves problemas, como la posibilidad de contagiar o contraer una infección de trasmisión sexual, perder relaciones importantes y tener problemas en el trabajo, problemas financieros o legales.
- Puedes tener dificultad para establecer y mantener relaciones interpersonales saludables y duraderas.