Perder la erección en medio del acto sexual es algo que le puede suceder a cualquier hombre, y aunque puede generar ansiedad o preocupación, es importante entender que, en la mayoría de los casos, no se trata de algo grave.
De hecho, según Planned Parenthood, una organización sin fines de lucro dedicada a ofrecer servicios de salud sexual y reproductiva en todo el mundo, la disfunción eréctil ocasional es completamente normal. Sin embargo, cuando se convierte en un problema recurrente, es fundamental identificar las causas y buscar soluciones.
Sigue a Cromos en WhatsApp¿Qué es lo que provoca la disfunción eréctil?
Existen diversas razones por las que un hombre puede perder la erección durante el sexo. Entre las más comunes se encuentran el estrés, la ansiedad y la presión de desempeño. La preocupación por satisfacer a la pareja puede generar una tensión emocional que afecta la respuesta física del cuerpo. En muchos casos, esta ansiedad hace que sea más difícil mantener la erección, creando un ciclo de preocupación y frustración.
Otro factor frecuente es el consumo de alcohol o drogas. Estas sustancias pueden alterar el sistema nervioso y dificultar la capacidad de mantener una erección. De igual manera, problemas de salud como la diabetes, hipertensión o enfermedades cardíacas también pueden ser responsables de una erección débil o ausente.
¿Qué hacer ante la disfunción eréctil?
Lo primero que hay que saber es que existen tratamientos eficaces para la disfunción eréctil. Desde medicamentos como el Viagra hasta terapia psicológica, las opciones varían según la causa del problema. Si el origen es emocional, un terapeuta especializado puede ayudar a reducir la ansiedad de desempeño o cualquier otro factor psicológico que esté afectando.
Cuando el problema es físico, cambiar ciertos hábitos puede ser muy beneficioso. Mantener una alimentación equilibrada, hacer ejercicio regularmente y evitar el consumo excesivo de alcohol o tabaco son medidas que no solo mejoran la salud en general, sino que también ayudan a mejorar la función sexual.
Hablar abiertamente con la pareja también es clave. Muchos hombres evitan discutir este tema por vergüenza, pero compartir las preocupaciones y buscar soluciones juntos fortalece la relación. A veces, la falta de erección está relacionada con una desconexión emocional o con expectativas no comunicadas en la relación sexual.
Explorar el placer de manera conjunta, probar nuevos estímulos o juegos previos, e incluso elegir el preservativo adecuado, son pasos que pueden marcar la diferencia.
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De esta forma, queda claro que perder la erección durante el sexo no debe ser motivo de alarma inmediata. En la mayoría de los casos, es una combinación de factores emocionales, físicos o incluso hábitos de vida. Lo importante es no ignorar el problema si se vuelve recurrente y, sobre todo, buscar ayuda profesional para identificar las causas y encontrar el tratamiento adecuado.
*Contenido generado con asistencia de la IA.
