¿Qué es el ghosting y qué pasa por la mente de una persona que lo hace?

En la era digital, las formas de relacionarnos han cambiado drásticamente, facilitando tanto la conexión como la desconexión entre las personas.

Con aplicaciones de citas y redes sociales, es más sencillo iniciar un vínculo, pero también lo es desaparecer sin dejar rastro. Este fenómeno, conocido como ghosting, se ha vuelto cada vez más común, afectando tanto a relaciones románticas como de amistad.

¿Qué significa que te hacen ghosting?

El ghosting (término derivado de ‘ghost’: fantasma en inglés) es un fenómeno cada vez más común en las relaciones. Consiste en cortar toda comunicación con otra persona sin explicación alguna, desapareciendo de su vida como un fantasma. Esta práctica puede dejar a la persona afectada con sentimientos de confusión, rechazo y tristeza.

Aunque el término puede parecer reciente, la práctica de evitar el conflicto evadiendo la comunicación es algo que ha existido desde siempre. Sin embargo, en el entorno digital, esta acción ha adquirido nuevas dimensiones, siendo percibida por muchos como una de las formas más deshumanizantes de terminar una relación; entonces.

¿Por qué alguien opta por hacer ghosting?

Existen varias razones que pueden llevar a una persona a recurrir al ghosting en lugar de afrontar una conversación honesta. Según la psicóloga social y profesora de psicología en la Universidad Loyola de Maryland, la doctora Theresa E. DiDonato, uno de los motivos más frecuentes es la conveniencia. Ghostear resulta más fácil que enfrentar una situación incómoda, especialmente cuando la relación no ha sido muy intensa ni duradera.

Además, algunas personas ven esta como una estrategia para evitar conflictos o rechazos dolorosos, creyendo que desaparecer es menos cruel que decir directamente que no están interesados.

Desde una perspectiva psicológica, ciertas personalidades pueden estar más inclinadas a realizar ghosting. DiDonato explica que las personas con rasgos de la llamada ‘Triada Oscura’ —narcisismo, maquiavelismo y psicopatía— tienden a usar esta táctica más a menudo. Estos individuos suelen ser más fríos y calculadores, con menor empatía, lo que les permite justificar su comportamiento sin preocuparse demasiado por el impacto emocional en la otra persona.

Sin embargo, para la investigadora de doctorado en la Universidad de Gante (Bélgica), Janneke M. Schokkenbroek, quien estudia el papel de la tecnología digital en la forma en que iniciamos, mantenemos y terminamos las relaciones íntimas, y cómo esto puede ser perjudicial; no siempre el ghosting es una acción malintencionada.

En algunos casos, la persona que ghostea lo hace para proteger su propio bienestar emocional o incluso su seguridad. Si la otra persona exhibe comportamientos indeseables o peligrosos, el ghosting puede ser una manera de salvaguardarse de situaciones potencialmente tóxicas.

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De esta forma, aunque el ghosting puede parecer una solución rápida y menos confrontativa, suele dejar un impacto negativo en quienes lo sufren.

Comprender las motivaciones detrás de esta conducta puede ayudar a las personas a manejar mejor la situación y evitar caer en patrones de comunicación evasiva.

*Contenido generado con asistencia de la IA.