Las rejillas del horno pueden ser una de las cosas más difíciles de limpiar en la cocina. Con la acumulación de grasa y restos de alimentos, las rejillas pueden terminar siendo un verdadero desafío. Sin embargo, con los siguientes consejos, puedes hacer que la tarea de limpiar las rejillas del horno sea más fácil y efectiva.
Te puede interesar: Cómo limpiar la vajilla de porcelana y mantenerla impecable
Sigue a Cromos en WhatsAppPor ejemplo, puedes utilizar bicarbonato de sodio mezclado con agua caliente para hacer una pasta y frotar las rejillas con ella. También puedes dejarlo una noche y utilizar vinagre blanco para aflojar la grasa y la suciedad. Puede ser una tarea desafiante, pero no es imposible. Siguiendo estos consejos y trucos, puedes hacer que la tarea de limpieza sea más breve, y disfrutar de un horno limpio y reluciente en poco tiempo.
Pasos para limpiar las rejillas del horno y eliminar la grasa
Necesitarás: agua caliente, detergente, bicarbonato de sodio.
1. Retira las rejillas del horno:
Lo primero que debes hacer es retirar las rejillas del horno. Si tu horno es eléctrico, asegúrate de desconectarlo antes de retirar las rejillas.
2. Sumerge las rejillas en agua caliente:
Llena en una bandeja o balde con agua caliente y sumerge las rejillas en él. Si las rejillas no caben en la tina, puedes ponerlas en una bolsa de basura grande y llenarla de agua caliente.
3. Agrega detergente para platos:
Una vez que las rejillas están sumergidas, agrega una buena cantidad de detergente para platos al agua. El detergente para platos ayudará a aflojar la grasa y la suciedad de las rejillas.
El bicarbonato es una sustancia que puede servir para tratar la gastritis. Conoce más secretos aquí.
4. Remueve la suciedad superficial con un cepillo:
Con un cepillo de cerdas duras, frota la suciedad y la grasa de las rejillas. Si hay manchas persistentes, utiliza un estropajo de cocina o una esponja abrasiva, pero no te preocupes, lo que no puedas eliminar lo eliminará el bicarbonato.
5. Agrega bicarbonato y deja reposar por una noche:
Después de limpiar las rejillas, enjuágalas con agua caliente para quitar el exceso de detergente y suciedad. Si es necesario, repite el proceso de limpieza hasta que las rejillas estén completamente limpias.
6. Sácalas del agua y termina de limpiar:
Una vez que las rejillas estén limpias, sácalas y termina de limpiar con una toalla limpia y déjalas secar completamente antes de volver a colocarlas en el horno.
Te puede interesar: Elimina las manchas de aceite de tu ropa con estos trucos