La miopía, una afección visual que dificulta ver objetos a distancia, está en aumento a nivel mundial. Un reciente estudio publicado en el British Journal of Ophthalmology advierte que, para 2050, más de 740 millones de niños y adolescentes podrían padecerla.
Actualmente, 1 de cada 3 jóvenes ya sufre de miopía, y las cifras van en aumento, especialmente en regiones como Asia Oriental. Este fenómeno representa un reto importante para la salud pública, sobre todo porque la miopía tiende a desarrollarse en la infancia y empeorar con la edad.
Sigue a Cromos en WhatsApp¿Qué está causando el aumento de la miopía en niños?
Los expertos coinciden en que varios factores están contribuyendo al incremento de casos de miopía en los niños. Entre ellos, el uso excesivo de pantallas y la falta de tiempo al aire libre juegan un papel fundamental. La visión de los más pequeños es especialmente sensible a los factores ambientales, ya que se encuentran en una etapa crucial de desarrollo visual. La pandemia de COVID-19, que obligó a los niños a pasar más tiempo dentro de casa, podría haber acelerado esta tendencia.
Además, el estudio revela diferencias geográficas significativas. En Asia, donde los niños empiezan la educación formal desde muy temprana edad, la prevalencia de miopía es mucho mayor. Por otro lado, en regiones como África, donde la alfabetización comienza más tarde y el tiempo al aire libre es mayor, los casos de miopía son menores.
¿Qué podemos hacer para prevenir la miopía en nuestros hijos?
Si bien las estadísticas son preocupantes, existen varias acciones que los padres y las escuelas pueden implementar para prevenir el desarrollo de miopía en los niños. Aquí te presentamos algunas estrategias clave:
1. Promueve actividades al aire libre
Los estudios demuestran que los niños que pasan al menos dos horas al día al aire libre tienen menos probabilidades de desarrollar miopía. La exposición a la luz natural es beneficiosa para el desarrollo ocular, y el tiempo al aire libre también fomenta el ejercicio físico, lo que tiene múltiples beneficios para la salud en general.
2. Establece límites de tiempo frente a las pantallas
Con el aumento del uso de dispositivos electrónicos, es esencial que los padres controlen el tiempo que sus hijos pasan frente a una pantalla. Se recomienda establecer un límite diario para el uso recreativo de pantallas, especialmente en niños menores de 18 años, y fomentar pausas frecuentes para reducir la fatiga ocular.
3. Fomenta el hábito de la lectura saludable
La lectura a corta distancia es otra actividad que puede agravar la miopía si no se hace correctamente. Anima a tus hijos a leer en ambientes bien iluminados y a mantener una distancia adecuada del libro o dispositivo que estén usando.
4. Realiza revisiones oculares periódicas
Detectar la miopía en sus primeras etapas es clave para implementar intervenciones tempranas. Los expertos sugieren que los niños deberían hacerse revisiones oculares anualmente, comenzando a partir de los 3 años. Esto no solo ayudará a diagnosticar la miopía, sino también otros problemas de visión que puedan afectar el rendimiento escolar.
5. Fomenta el equilibrio entre actividades
El equilibrio entre las actividades al aire libre y las que se realizan en interiores es vital. Crear una rutina diaria que combine juegos al aire libre, tareas académicas y el uso moderado de pantallas ayudará a reducir los factores de riesgo de desarrollar miopía.
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¿Qué nos depara el futuro con la miopía en niños?
Con una proyección de más de 740 millones de casos de miopía en niños y adolescentes para 2050, es crucial que los padres, educadores y profesionales de la salud trabajen juntos para frenar esta tendencia. La educación visual y el desarrollo de políticas públicas que promuevan la salud ocular desde una edad temprana serán esenciales para reducir las cifras.
En conclusión, aunque el aumento de la miopía es un desafío global, existen medidas preventivas claras que pueden ayudar a proteger la visión de nuestros hijos. Fomentar el tiempo al aire libre, controlar el uso de pantallas y realizar revisiones oculares periódicas son algunos de los pasos más efectivos para frenar esta tendencia.
*Contenido generado con asistencia de la IA.